El director Ricardo Díaz, principal conspirador de un novedoso teatro, tan perturbador como apasionante, nos trae No ser Hamlet, su más reciente propuesta escénica basada en el clásico del cisne de Avon. “La obra reflexiona en el problema de la muerte como límite desconocido sobre el que se pregunta el personaje en su famoso soliloquio”, afirma el autor. Pero el espectáculo va mucho más allá: 11 actores se desplazan como fantasmas a lo ancho de las tres salas de exhibición del museo, en el que se escuchan martillazos, voces que se repiten por todo el espacio, música, video, todo parte de un ejercicio en el que se reta al espectador, invitándolo a un juego intelectual en el que tendrá que descubrir algunos de los misterios y reflexiones que se hacía el príncipe de Dinamarca.
-
No ser Hamlet
Museo Carrillo Gil.
Av. Revolución 1608, esquina Altavista,
Col. San Ángel.
Viernes y sábados 20:00 horas.
Hasta el 21 de diciembre. $80 pesos.