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Un capullo que no logra florecer

La floricultura bajo invernadero enfrenta un mal año por la sobreoferta de flores en el mercado nac
mar 20 septiembre 2011 02:54 PM

Un hechizo efímero de fragancia, frescura y color. Así son las flores, -caracterizadas además por una extrema fragilidad. De ahí que sorprenda que -algunos floricultores mexicanos las exporten a Estados Unidos, a Centroamérica, -al Caribe. Igualmente sorpresivo es que, en pocos años, un pequeño pueblo del -Estado de México, Villa Guerrero, se haya convertido en el principal productor -de flores bajo invernadero. Lo que, en cambio, suena bastante familiar es la -división de este gremio, los descalabros en la exploración de los mercados -externos y la ausencia de una política oficial que brinde el impulso que -requiere esta floreciente industria.

- En el banco de datos de exportadores que maneja la Secretaría de Comercio y -Fomento Industrial (Secofi) hay un rubro muy reciente pero con un crecimiento -asombroso. Es la clave 06.03: “Flores y capullos, cortados para ramos o -adornos, frescos, secos, blanqueados, teñidos, impregnados o preparados de otra -forma.” Se divide en dos apartados: “Flores frescas” y “Las demás”. -Apenas comenzó a registrar datos en febrero de 1993. Ese año, la exportación -de flores frescas fue modesta, un volumen valuado en $252,093 dólares. Pero en -cinco años experimentó un crecimiento superior a 800%. En 1997, la cifra -ascendió a $2’075,603 dólares y en el primer cuatrimestre de 1998 superó -50% del total del año anterior.

- Es un rubro boyante, aunque todavía discreto en cuanto a las cantidades que -maneja. Sin embargo, podría pagar cara su juventud. En algunos sitios de Villa -Guerrero se observan instalaciones abandonadas o que ni siquiera fueron -terminadas. Hace poco quebró el rancho Exporosa y otros enfrentan una -situación crítica.

- - EN NOMBRE DE LA ROSA
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El origen de la vocación floricultora en Villa Guerrero está difuso. -Algunos testimonios lo ubican en los 60, otros en los 70. Lo cierto es que -inició de manera experimental por parte de los propios campesinos de la zona, -quienes combinaron la siembra de granos básicos y hortalizas con rosales. Los -cultivos fueron a cielo abierto, a la buena de Dios. Y el milagro ocurrió. Las -tierras demostraron aptitud para ésta y otras flores.

- Los campos comenzaron a florear. A mediados de los 80 varios inversionistas -instalaron pequeños invernaderos. (Sólo uno de ellos decidió probar en -grande: Ricardo Degollado, quien a la fecha encabeza la mayor empresa productora -de flor de la zona, Cosmoflor). Pocos años después surgió una iniciativa -oficial para promover la construcción de invernaderos y fomentar la -floricultura de exportación. Las autoridades estatales y municipales dieron -facilidades y apoyos; los empresarios pusieron el capital. Cada rancho inició -con al menos una hectárea. De esa manera, el panorama de Villa Guerrero empezó -a poblarse de largas naves forradas de verdosas mallas plásticas.

- Las perspectivas parecían inmejorables, dada la cercanía con dos de los -mayores mercados mundiales: Estados Unidos y Canadá. Los lugareños refieren -que incluso el ex gobernador mexiquense Mario Ramón Beteta y el ex presidente -Miguel de la Madrid probaron suerte; al poco tiempo desistieron. “No lo -parece, pero es un negocio que exige mucha atención y cuidado”, dice un -floricultor.

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- La peculiar orografía de Villa Guerrero da como resultado una variedad -climática de 10 grados en sólo 15 kilómetros. Eso permitió sembrar -invernaderos por doquier para toda clase de flores. Aunque el caballito de -batalla es la rosa en sus distintas variedades, se pudieron atacar otros nichos -del mercado. En la zona fría se introdujeron tulipanes, iris, lilium; en la -templada, lilis, calas; en la cálida, licianthus, limonium, gerbera.

- Datos de la Secofi señalan que en febrero de 1993 salieron los primeros -embarques del país. Fueron exportados 40 kilos de flores. En enero pasado -cruzaron las fronteras nacionales 208 toneladas. De enero a abril de este año -sumaron 637 toneladas.

- “Es un negociazo, porque es netamente de exportación y se calcula en -dólares”, afirma Héctor Rojas, gerente de Fertilizantes en la filial -mexicana de la trasnacional Koor Industries LTD, una empresa que ofrece -tecnología avanzada para la floricultura. No obstante, Rojas admite que el -crecimiento del sector ha sido mucho más lento de lo esperado, con inversiones -reducidas.

- A escala nacional hay 800 hectáreas de cultivo bajo invernadero. Si bien la -extensión no es despreciable, es muy inferior a las 2,250 hectáreas de Ecuador -y las 3,000 de Colombia, las mayores potencias de América Latina en este ramo.

- - LAS GUERRAS FLORIDAS
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El caballito de batalla de los floricultores es la rosa. En una hectárea de -invernadero se siembran de 70,000 a 80,000 rosales, los cuales producen flor -cada 60 o 70 días. La producción anual ronda el millón de rosas por -hectárea. A los invernaderos de Villa Guerrero se suman los de otros poblados -mexiquenses y de Aguascalientes, Michoacán, Distrito Federal, Puebla, Oaxaca, -Querétaro, Veracruz y Coahuila.

- Sus miras son elevadas: exportar entre 70 y 80% de la producción, el resto -colocarlo en florerías nacionales. Pero a veces las cosas no resultan como se -esperaba y su producción entra a pelear en los canales de comercialización del -mercado mexicano, con clara desventaja. Sobre todo porque a la vista del auge -floricultor, muchos campesinos dejaron las siembras tradicionales para cultivar -flores. Así ocurrió en Villa Guerrero y otras poblaciones.

- Viejos y nuevos floricultores –los que producen a cielo abierto y en -invernadero–, todos se disputan créditos, apoyos en especie (fertilizantes, -plaguicidas, materiales de construcción) y, sobre todo, el mercado nacional.

- Una expresión representativa es el mercado de flores en la Central de -Abastos del DF Ahí convergen productores de todo el país. No hay una autoridad -que ponga orden. La mayor parte de los locatarios son comercializadores. En los -estacionamientos, pequeños productores ofrecen su flor a bajo precio. El -comercio formal se funde con el informal. “La vendimia es un relajo –comenta -Jorge Alberto Pérez, propietario de uno de los locales–. Las reglas las hace -la gente sobre la marcha y es común que los productores deban recurrir a -intermediarios.”

- María Eugenia Díaz, de la Asociación Nacional de Productores de Flor bajo -Invernadero (Asproflor), considera que la Central de Abastos manifiesta las -carencias del mercado mexicano. “Los floricultores estamos a merced de un -montón de marchantes que nos compran a lo que quieren y que no dan el trato -adecuado al producto. Hace falta un mercado digno, un sistema de -comercialización de mejor nivel.”

- En opinión de Patricio Rivero, propietario de la empresa Floravic, los -vicios existentes en el manejo de la flor ponen en riesgo el propio mercado. “La -gente busca un producto bueno, que dure. De no encontrarlo, automáticamente -perdemos al cliente, que buscará un sustituto de las flores.”

- A decir de Rivero y otros floricultores, debido a la creciente oferta, el -mercado nacional está a punto de saturarse. Un indicio claro se vio el pasado -Día de las Madres. Por ello, el Consejo Mexicano de la Flor ha ideado una -campaña de promoción con la cual pretende cambiar los hábitos de consumo, -para que la población no sólo compre flores el 14 de febrero, el 10 de mayo, -el Día de Muertos, el 12 de diciembre o para salir del paso ante algún -compromiso, sino que se acostumbre a tener un ramo en casa. Con esa campaña, se -espera incrementar las ventas en 25%.

- Para Jorge Alberto Pérez esa iniciativa es buena, pero no suficiente. “Es -necesario establecer una tecnología de crecimiento de la producción en todo el -ramo, como lo hacen los jitomateros de Sinaloa, que definen pautas para todo el -sector de acuerdo con la comercialización posible. Por ello constantemente -están buscando nuevos mercados, para que el crecimiento no se detenga. Pero al -no existir esto en la floricultura, se dan fenómenos como el siguiente: el -crisantemo se dejó de sembrar porque no tuvo buenas temporadas. Este año -escaseó, de manera que la docena (cuyo precio no superaba los $3 pesos) se fue -hasta $35 pesos. Esta circunstancia provocará que el próximo año gran -cantidad de productores siembren crisantemo, creyendo que será el gran negocio.”

- - ALLENDE LAS FRONTERAS
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La opción para los floricultores de invernadero es exportar. Pero a veces, -más que la panacea resulta ser la caja de Pandora. Abundan las experiencias -amargas.

- El principal problema es la ausencia de garantías de buen pago. “Eso mata -este negocio. Uno manda a Estados Unidos de buena fe y de pronto nos sorprenden -los clientes con la aplicación de plazos de crédito inexistentes o, de plano, -no terminan de pagarnos”, señala Pérez.

- Rivero concuerda: “Ese es un problema que a muchos nos ha costado mucho -dinero. Hemos tenido que aprender a golpes. La Secretaría de Comercio elaboró -recientemente el programa PACA (Perishable Agriculture Commodities Act), para -defender los derechos del exportador a Estados Unidos y Canadá. Apenas lo -estamos revisando.”

- Pero ese no es el único contratiempo. “Por todos lados hay que hacer pagos -–explica Rivero–. Para iniciar los trámites se expide una solicitud -dirigida a un agente aduanal, a quien se le paga una cantidad; él la lleva a -una aduana, donde otras personas hacen los trámites. Después debemos sortear -más trabas burocráticas. Y todavía hay que pasar por el semáforo en el -aeropuerto y, si sale luz roja, someternos a una segunda inspección. Las guías -fitosanitarias que deben acompañar los permisos son carísimas ($160 pesos) y -constantemente suben de precio. Eso no tiene justificación. Se trata -simplemente de llenar una hoja que previamente está firmada por un ingeniero de -la zona. Son muchas las circunstancias que nos ponen piedritas en el camino.”

- Pérez recuerda: “En 1997 el presidente Ernesto Zedillo visitó Villa -Guerrero. En ese entonces dio instrucciones al secretario de Agricultura -(Francisco Labastida) para crear un comité de fomento que diera facilidades a -los floricultores. Pero los apoyos se han concentrado en los mayores productores -(por ejemplo, 70% de las ayudas para comercialización). Dadas sus capacidades, -ellos no lo necesitan. A los demás les ofrecen fertilizantes o materiales de -construcción, pero el cuello de botella es la comercialización.”

- A este respecto, Rivero comenta irónico: “Tenemos el dicho de que quien -tiene más saliva traga más pinole, y los chiquitos no tenemos suficiente -saliva para convencer a los que manejan el dinero para que nos lo faciliten. -También ocurre que han soltado dinero en forma indiscriminada y no se recupera. -Ya es tiempo de enderezar el camino.”

- - A RÍO REVUELTO
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Quizá el mayor problema de los floricultores es su división como gremio. -Para muestra, un botón: el Consejo Mexicano de la Flor (CMF) agrupa cerca de 50 -asociaciones de floricultores. Prácticamente en cada zona donde se cultivan -flores surge una asociación o al menos una sociedad de productores (no todas -están en el CMF). Pero algunas regiones donde se practica la floricultura -industrial tienen varios gremios que rivalizan entre sí. Son los casos del -Estado de México, Morelos, Puebla, Michoacán y Veracruz. Incluso pequeños -poblados no consiguen unificar criterios y fuerzas, como ocurre con los -floricultores bajo invernadero de Villa Guerrero.

- Aunque ahí se encuentra la sede de Asproflor, ésta sólo cuenta entre sus -socios a 11 productores del municipio. El resto son de Tenancingo (10 -productores), Coatepec Harinas (dos) y Metepec, Zumpahuacán e Ixtapan de la Sal -(uno en cada sitio), todos ellos del Estado de México. Se suman a la lista dos -floricultores de Uruapan y uno de Tuxpan, en Michoacán; dos del DF y uno de -cada una de las siguientes ciudades: Aguascalientes, Querétaro, Puebla; Santa -Cruz Xoxocotlán, Oaxaca; Fortín de las Flores, Veracruz, y Saltillo, Coahuila.

- La asociación nació en 1992. Según el CMF, es uno de los principales -grupos exportadores. No obstante, algunas empresas han abandonado la -asociación. Díaz reconoce la atomización de los productores. “Algunos -piensan que cada quien tiene su manera de matar pulgas, y como todos producimos -rosas... La diferencia es que entonces nunca destacamos. Los ecuatorianos son -conocidos como los mejores productores de rosas del mundo. De México, a lo -mejor una o dos empresas han destacado, el resto somos del montón.

- ”Siempre estamos haciendo cada quien su propia lucha, no pensamos que si -compartimos información y experiencias las cosas nos pueden resultar mejor. A -fin de cuentas, nos afectan los mismos factores: el clima, la mano de obra, las -negociaciones para la exportación, la problemática del mercado nacional.”

- Arturo Pérez, propietario del rancho San Francisco, en Villa Guerrero, -refiere: “Hay países, como Colombia, que no consumen ni la cuarta parte de lo -que producen, pero al exportar presentan un frente común. En la exposición de -Japón era una tristeza ver el stand de Colombia y el de Ecuador, -comparados con los seis u ocho de productores mexicanos que nos presentamos a -título individual, tratando de pelear los buenos clientes. Y lo más triste es -que en forma aislada no tenemos capacidad de atender las necesidades de un -cliente grande.”

- Agrega: “Hacen falta apoyos más tangibles. Por ejemplo, que las -autoridades respalden al Consejo Mexicano de la Flor para establecer centros de -comercialización, con normas de calidad y reglamentos explícitos. Así el -producto tendría más salida hacia el extranjero, con una buena planeación de -comercialización. Desgraciadamente aquí el que se pone más abusado es el que -saca más producto, y a los demás que Dios les ayude. Ese individualismo nos -perjudica a todos, porque cuando algún exportador no consigue sacar su -producción inunda los canales nacionales y viene el abatimiento del precio.”

- En uno de los márgenes del pueblo se encuentra una gran nave de la -trasnacional estadounidense Continental. “Es un centro de acopio. En fechas -importantes, de ahí salen diariamente dos tráilers cargados con flor rumbo a -Estados Unidos; el resto del año, de tres a cinco tráilers por semana. Si los -productores de Villa Guerrero estuviéramos unidos seríamos nosotros los que -haríamos eso. Además, a esa empresa le facilitan todos sus permisos”, -comenta Pérez.

- A decir de Díaz, una de las prioridades de Asproflor será precisamente -buscar mecanismos que permitan cambiar la mentalidad de los productores a fin -de, por un lado, propiciar la unidad, y por otro, imbuir una actitud más -agresiva en cuanto a sistemas organizacionales y calidad de producción. -Asimismo, la asociación seguirá trabajando con el propósito de sensibilizar a -las autoridades para que den apoyos más decididos a los exportadores de flor y -profesionalicen los mecanismos aduanales.

- Pero mientras ese día llega, los grandes productores prefieren actuar al -margen de los gremios. Ese es el caso, en Villa Guerrero, de Cosmoflor. En -sociedad con Visaflor y medianos y pequeños productores opera como un solo -consorcio y realiza grandes embarques. Su fuerza le permite gestionar apoyos, -créditos y facilidades sin la intermediación de terceros. Con la intención de -seguir su ejemplo, está gestándose una nueva asociación, Productores de -Flores Mexicanas (Proflormex), con una decena de productores de Villa Guerrero, -que buscará atender la demanda de clientes mayores.

- - UN LARGO INVIERNO
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Instalar un invernadero de estructura metálica, con plantas importadas, -representa una inversión de $370,000 dólares (desembolso recuperable en dos -años), según estimación de Rivero. A eso deben añadirse los gastos -permanentes en químicos, agua, fertilizantes, luz y personal. Todo ello es -necesario si se quiere obtener un producto con calidad de exportación.

- Los cultivos a cielo abierto o sólo cubiertos por un plástico se -intemperizan, se manchan y son propensos a plagas. En cambio, en los -invernaderos prevalece un calor húmedo, casi selvático. Ahí se intentan -controlar los factores climáticos, la calidad del suelo, las enfermedades y -plagas.

- Los pequeños productores tienen media hectárea de cultivo, los medianos -hasta cuatro hectáreas y los grandes hasta 10. Esta última extensión es la -que posee un pequeño productor en Ecuador. “Tenemos mucho que aprender de los -ecuatorianos y los colombianos –afirma, categórica, Díaz–. Debemos -sacarnos de la cabeza que sabemos todo lo necesario y aprovechar su experiencia.”

- En opinión de Díaz, hay varios aspectos en los sistemas productivos -sudamericanos dignos de consideración. El ritmo de crecimiento que imprimen a -sus cultivos, por ejemplo, es mucho mayor. “Todo el tiempo buscan ir a la -vanguardia, sus variedades son las de moda en el mercado. A los productores de -rosa nos lleva de ocho a 10 años mantener el cultivo, por el costo de la -planta. Los ecuatorianos no se detienen por eso, si a los cinco años la -variedad ya no funciona la quitan. ¡Incluso al año!”

- Pero también es cierto que esas naciones cuentan con un sólido programa -nacional de apoyo. En México, en cambio, lo que priva entre medianos y -pequeños productores es la zozobra. Héctor Rojas, de Koor, se entusiasma al -hablar de la calidad de las flores mexicanas. La “vida de florero” –dice–, -el tiempo que viven las flores después del corte, es uno de los mejores, con -10, 15 y hasta 25 días. Pero de la floricultura nacional, la de invernadero -sigue representando menos de 10%. “Este sector requiere tecnología de -importación y eso es lo que ha detenido su crecimiento. La gente de varias -asociaciones ha viajado al extranjero y tomado cursos, pero su actividad sólo -puede traducirse a labores de orientación e intentos de organización.”

- Esta incertidumbre económica es la que lleva a Arturo Pérez a confesar: “Ya -tengo 10 años en esta actividad y no estoy cansado, más bien desilusionado, -por los problemas constantes y riesgos permanentes de perder rentabilidad.”

- Según Díaz, aunque el programa nacional de floricultura está enfocado a -todo el sector, los productores bajo invernadero podrán obtener beneficios. “Hay -ciertos subsidios para la compra de invernaderos y equipos.”

- Rivero estima que esto será una solución solamente si se otorgan créditos -con tasas de interés similares a las extranjeras y con un buen plazo. “En -otros países (incluidos Estados Unidos y Canadá) los créditos mantienen tasas -de interés que oscilan entre 4 y 9% y se conceden hasta a 15, 20 y 30 años. En -esas condiciones, la industria en Ecuador se ha desarrollado de una manera -sensacional; en esta década han construido casi 2,000 hectáreas de -invernaderos.”

- Con apoyos de esa naturaleza sueñan las empresas proveedoras de equipos, -materiales y servicios. A decir de Rojas, “podríamos arrancar a grandes -pasos, con tecnología de punta. El potencial existe. Nosotros queremos -introducir a México un invernadero de tecnología israelita. Dura 20 años, su -tecnología supera a la de los holandeses pues mientras estos realizan un sondeo -mensual de las plantas y elaboran proyecciones a 15 días, los israelitas tiene -tableros computarizados que al momento señalan las necesidades de las plantas y -hacen proyecciones hasta a cinco años. La desventaja es su costo, son entre 15 -y 20% más caros que los holandeses. Pero con un programa oficial de apoyos -crediticios resultarían muy accesibles”.

- Mientras ese momento llega, el botón de la floricultura de exportación -seguirá a medio abrir.

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