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Un error caro

La lucha del PRI y el PAN con López Obrador nunca debió rebasar el debate político. Los organismo
mar 20 septiembre 2011 02:55 PM

Expansión defiende desde su fundación en 1969 los principios de la -libre empresa, la apertura de los mercados y la limitación del papel del Estado -en el mundo de los negocios. Nuestra idea es que estos principios, con una -adecuada regulación, conducen al desarrollo del país, reducen la pobreza y -desatan círculos virtuosos de crecimiento.

- Andrés Manuel López Obrador, gobernador del Distrito Federal entre enero de -2001 y abril de 2005 y potencial candidato del Partido de la Revolución -Democrática (PRD) a la Presidencia del Gobierno de México, no está de -acuerdo. López Obrador defiende, al menos públicamente, un Estado -intervencionista, se opone a la ineludible apertura del sector energético a la -inversión privada y promete renovar al país apelando a políticas que, en -opinión de esta revista, fracasaron hace dos décadas. Ante la creciente -necesidad de diálogo de una democracia joven, él ha recurrido en exceso a la -polarización y no ha sabido responder con claridad a la corrupción de sus -colaboradores más cercanos. La estrategia parece haberle rendido fruto y las -encuestas lo sitúan como el candidato favorito de gran parte de la población a -la Presidencia.

- Sus rivales han decidido apagar la chispa posible con un diluvio universal de -consecuencias imprevisibles.

- Junto con los principios de libertad económica Expansión ha -defendido, en estos 36 años, los de la libertad política, en la idea de que -ambos se refuerzan mutuamente. La solidez del Instituto Federal Electoral (IFE), -el Congreso plural, la creciente libertad de prensa y la victoria de Vicente Fox -en 2000 fueron grandes pasos de México hacia la modernidad. El proceso que -arranca con el desafuero de López Obrador, por lejano que esté su programa de -lo que defienden estas páginas, supone una amenaza a estos logros y un riesgo a -la estabilidad del país.

- La percepción universal, tanto en los programas radiofónicos populares como -en los editoriales de la prensa internacional, es que el principal postulante a -la Presidencia puede desaparecer del juego electoral por un acuerdo de los dos -principales partidos políticos del país. El caso El Encino es, sencillamente, -irrelevante ante los graves problemas de México. Es curioso ver que, estos -mismos partidos, por acción u omisión, pactaron la impunidad de los -responsables del desvío de fondos de Pemex a las arcas del PRI, los -legisladores Aldana y Deschamps, dos ejemplos de para qué se inventó (y no se -utilizó) el desafuero.

- El principio es claro: la disputa entre partidos debe resolverse en las -urnas, por el bien del frágil proceso democrático.

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- Sorprende además la torpeza política de quienes apoyaron el proceso en el -gobierno, el PAN y el PRI, ya sea por convicción legal o por estrategia -política. Si esperaban quitar de en medio a su rival, lograron todo lo -contrario: unir al fragmentado PRD y dar presencia televisiva en toda la -República a quien sólo era conocido en su Tabasco natal y la Ciudad de -México. Si su apuesta era legalista, en la idea de que “nadie puede estar por -encima de la ley”, escenificaron en la Cámara de Diputados la mayor -acusación política que la Presidencia y la Justicia han recibido en un siglo.

- La vía para impedir que un gobernante atente contra los logros económicos -no es meterlo en la cárcel, sino fortalecer las instituciones económicas y -políticas que impedirán que se repitan los desastres del pasado, el IFE, el -Congreso, los tribunales o el Banco de México. Algunas de ellas se han expuesto -a la deslegitimación por entrar a este juego.

- Por eso, es preocupante que el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) haya -respaldado, a través de declaraciones públicas en favor del “cumplimiento de -la ley”, el acuerdo de los dos principales partidos del país. Sobre todo, -cuando la Coparmex, uno de sus integrantes, era partidaria de la sana -neutralidad. El CCE, la voz de la empresa en este país, no debería reforzar la -tesis victimista de López Obrador y agudizar la polarización social que puede -generar este caso. Al contrario, debiera ayudar a la consolidación de las -instituciones democráticas y, sin ceder un ápice en sus convicciones, fomentar -el diálogo.

- México vive una transición política. Por inútil que parezca a veces hay -que tender puentes hacia el victimismo de la izquierda mexicana que cree que hay -un “sistema” en su contra. Los organismos empresariales no pueden caer en la -trampa de confirmar estos miedos con su participación en operaciones de dudosa -naturaleza.

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