Hace 10 años, la industria generaba menos de 1% de la riqueza de México. Pero la demanda y los precios del oro, la plata y el cobre hicieron que de 2002 a 2012 su aporte creciera 125%.
Las empresas mineras mexicanas y canadienses se reparten el mercado. El oro está en manos de compañías canadienses. La plata y el cobre, de mexicanas.