Cuando cargas gasolina ¿estás seguro de que te dan los litros por los que pagas? La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) ha inmovilizado cientos de estaciones de servicio en las que se han encontrado irregularidades. Sin embargo, estas son apenas una fracción del total de gasolineras que existen en el país, por lo que el riesgo para los consumidores puede estar latente en el resto.
6 tips para evitar el robo de gasolina
Despachar menos litros de los solicitados, fuga de combustible, carencia de holograma de calibración vigente o por corte (tiempo máximo en el cual se deberá inhabilitar automáticamente el dispensario una vez concluido el despacho, para iniciar uno nuevo), han sido motivos de la inmovilización de mangueras.
“Profeco no revisa litro por litro sino los componentes mecánicos y electrónicos de los despachadores para detectar que no haya fugas y goteras. La parte volumétrica la revisamos a través del jarreo”, explicó el exdirector de Verificación de Combustibles de la Procuraduría, Tomás Sánchez.
En sus revisiones la Profeco llega a la estación de la cual ha recibido reportes o denuncias con garrafones de acero inoxidable calibrados con los que los inspectores toman muestras de los dispensarios. “El factor sorpresa permite que la prueba sea efectiva, así no hay oportunidad de que alteren los despachadores”, dijo Sánchez.
Según Profeco estas seis aspectos pueden ayudar a los usuarios a evitar caer en un abuso de las estaciones de servicio:
1. Carga gasolina antes de que se termine tu reserva. En promedio un vehículo puede circular 40 kilómetros con la gasolina que le quede en la reserva de su tanque. “Para tener un comparativo de lo que cargas, procura cargar gasolina antes de que llegues a la reserva. Así te darás cuenta cuánto sube el indicador y verifica en las siguientes ocasiones que siempre suba al mismo punto con la cantidad de litros que solicites”, recomendó Sánchez.
2. Mucho ojo. Los dispensarios operan a través de un software que puede ser alterado de manera especializada. “El despachador no puedo hacerlo por sí solo”, comentó. Verifica que siempre marque en ceros el display antes de que te sirvan el combustible y que el precio del combustible corresponda al aumento del mes.
3. Pide un ticket o nota de tu compra. Cuando compres gasolina pide tu ticket, nota o factura si detectas anomalías, de esta manera la Profeco realizará la inspección correspondiente a la estación. “Las denuncias anónimas no nos funcionan”, dijo el funcionario.
4. Revisa los hologramas. En la parte de enfrente de los dispensarios o despachadores de gasolina, junto al display, deben estar colocados unos hologramas de Profeco o de la Unión de Verificación Acreditada (UVA) que indican que los dispensarios están calibrados.
5. No midas la gasolina en garrafones de plástico. El plástico es un material que con el calor se deforma, si cargas gasolina a través de un garrafón con estas características, eventualmente podrás notar que le cabe más o menos combustible, pero no tendrás la certeza si la gasolinera te está robando o no, advirtió el experto.
6. Fugas y goteras. Verifica que alrededor del dispensario no exista humedad porque la manguera puede tener fugas o podría gotear. La norma oficial que rige a las gasolineras permite que exista una tolerancia en cada carga de 100 mililitros más o menos combustible de lo solicitado por el cliente.