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Un restaurante de Berlín busca donantes para ofrecer cocina caníbal

Un restaurante de Berlín publicó en su página web una solicitud de donadores para preparar recetas de una supuesta tribu antropófaga
vie 27 agosto 2010 01:13 PM
humana
carne humana

Un restaurante que será inaugurado en Berlín ha despertado curiosidad y también indignación por una campaña publicitaria que busca donantes para conseguir 'carne fresca' para tener especialidades caníbales que ofrecer a sus clientes.

"Tras una revisión médica puede usted decidir qué parte de su cuerpo está dispuesto a donar", dice en su página web, en el apartado de Cómo hacerse socio, el restaurante Flimé , cuya localización se mantiene en secreto, aunque su apertura ha sido anunciada para el próximo 8 de septiembre.

El establecimiento ofrece un formulario para pedir datos personales de los posibles donantes: nombre, edad, posibles enfermedades crónicas, consumo de tabaco, drogas y alcohol, peso y grupo sanguíneo. En caso ser mujer, preguntan si están embarazadas.

El propietario es el brasileño Eduardo Amado, quien anuncia que el restaurante Flimé ofrecerá cocina de la cultura wari, un pueblo caníbal de la selva amazónica, en combinación con recetas clásicas brasileñas.

"Siguiendo el viejo proverbio wari, lo importante para nosotros es que 'comer es más que saciar el hambre. Contemplamos la alimentación como un acto espiritual en el que se asume el alma y la fuerza del ser que ingerimos", se publica en la página.

"Disfrute en Flimé de especialidades de aroma y sabores inolvidables que llegarán a entusiasmarle", destaca su propaganda que incluye una carta con los platillos.

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El sitio anuncia que asumirán los costos hospitalarios de los donantes y da a conocer que su local en Berlín será la primera sucursal en el extranjero y que su central está en la localidad amazónica de Guajara Mirim, en la Amazonia occidental.

En declaraciones al rotativo alemán Bild, el vicepresidente del partido Cristiano Demócrata en Berlín, Michael Braun, expresa su indignación y su asombro por la polémica iniciativa gastronómica.

"Espero que sólo se trate de una broma de mal gusto", afirma Braun.

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