Los edificios saludables estaban en tendencia antes de la pandemia, pero la contingencia sanitaria ha hecho a estos espacios indispensables. Ulises Treviño, director general de Bioconstrucción y Energía Alternativa, coincide en que el covid-19 aceleró los cambios para diseñar y construir espacios más saludables.
La arquitecta Veronica Schreibeis, directora fundadora de Vera Iconica Architecture and Developments y quien preside la Iniciativa de Arquitectura y Diseño de Bienestar del Global Wellness Institute (GWI) explica que la pandemia creó conciencia sobre cómo el entorno construido afecta a las personas: “Nuestros hogares se convirtieron en el lugar principal para nuestro trabajo, estudio, juego, ejercicio, creatividad y para cuidar de nosotros mismos y de los demás. Así que no necesitamos que nuestras casas nos saboteen. Deben nutrirnos. La arquitectura de bienestar trata de hacer selecciones que ayuden a vivir una vida óptima".
Para mejorar la salud de tu hogar, estos son algunas cosas que los expertos afirman debes considerar:
1. Materiales saludables
Los productos y materiales de nuestros hogares pueden contaminar el aire que respiramos. Los peores contaminantes son los pisos y los gabinetes porque la gran mayoría tienen compuestos orgánicos volátiles que se filtran en el aire. En este rubro también están los azulejos y losetas con selladores químicos, madera con tintes químicos, alfombras con retardadores de fuego y productos de limpieza.
2. Aire interior limpio
Un hogar saludable tiene aire limpio y mucha ventilación. Treviño menciona que uno de los cambios principales debe ser el de los sistemas de purificación y filtración de alto desempeño, que retienen elementos que pueden ser nocivos para las personas.
Además, debe considerarse la inyección de aire exterior cada determinado tiempo para conseguir que en el espacio interior para que se reduzca el riesgo de propagar un aire potencialmente contaminado.
La cocina también actúa como los pulmones del hogar, con sistemas de aire de compensación, que eliminan los contaminantes, el dióxido de carbono y las partículas mientras reemplazan el escape de aire con aire fresco.
3. Superficies sanitarias
El diseño de bienestar hace que la desinfección sea una prioridad en todas las áreas del hogar. Para mejorar la higiene en casa, considera las siguientes opciones en superficies.
- Encimeras antimicrobianas. Los materiales no porosos como el cuarzo funcionan para mantener alejados a los microbios. Otras superficies higiénicas incluyen laminados tratados con agentes. También las superficies de cobre funcionan como agentes antimicrobianos naturales.
- Dispositivos de luz ultravioleta. Funcionan para matar gérmenes. La FDA reconoce la luz UV-C como un desinfectante para el aire, el agua y las superficies no porosas.
4. Iluminación circadiana
Nuestros cuerpos autorregulan los procesos fisiológicos en sincronía con los ciclos diarios de luz y oscuridad en lo que se conoce como ritmos circadianos.
La iluminación circadiana ajusta el color y el brillo de la luz según la hora del día. En términos simples, la iluminación circadiana imita el arco diario natural y ayuda a regular nuestros ritmos biológicos, lo que conduce a un mejor sueño y bienestar.
5. Santuario del sueño
Las investigaciones muestran que el descanso de calidad fortalece el sistema inmunológico, reduce el riesgo de enfermedades crónicas y mejora la salud física y mental. En este sentido, la recámara toma un papel importante. Según la Sleep Foundation, factores como el ruido, la luz, la temperatura y la calidad del colchón influyen en el sueño.
6. Amenidades
El diseño de bienestar también se extiende a los baños con comodidades tipo spa que alivian y reducen el estrés, que incluyen cabezales de ducha de hidroterapia, saunas de infrarrojos y aromaterapia.
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