Muere Harper Lee, autora de ‘Matar un ruiseñor’
Nelle Harper Lee, premio Pulitzer 1961 por su obra literaria Matar un ruiseñor (1960), falleció este viernes a los 89 años de edad en Monroeville, Alabama, su ciudad natal.
La ciudad de Monroeville confirmó en redes sociales el fallecimiento de la autora.
La autora había sufrido una apoplejía en 2007 y desde entonces atravesaba graves problemas de salud, reportó la agencia EFE.
Harper Lee 'murió en paz anoche a la edad de 89 años', indicó este viernes su editorial, HarperCollins en un comunicado. ''El mundo sabe que Harper Lee era una escritora brillante pero no muchos saben que era una mujer extraordinaria de gran alegría, humildad y amabilidad. Vivió su vida como quería, rodeada de libros y de las personas que la amaban'.
En julio de 2015, tras 55 años de espera para los lectores, la escritora lanzó a la venta la sorpresiva segunda parte de su clásico literario Ve y pon un centinela , en la cual continúa narrando la historia de su entrañable personaje, Atticus Finch.
Ve y pon un centinela, editada por HarperCollins, pone en escena veinte años más tarde a los mismos personajes de su primera, considerada una obra maestra del siglo XX por su retrato de la injusticia racial en la era de la depresión en el sur de Estados Unidos.
Con este última obra, Lee lideró las ventas de libros en 2015 en Estados Unidos con 1.6 millones de ejemplares, de acuerdo con datos de Nielsen.
En sus últimos días la autora sufrió deficiencias visuales y auditivas.
Una mirada al racismo
Lee abandonó su pequeña ciudad natal en el rural sureste estadounidense en 1949 para ir a Nueva York y labrarse una carrera de escritora.
En julio de 1960 se publicó su novela Matar un ruiseñor, inspirada en su niñez, que inmediatamente se convirtió en un éxito de ventas y de crítica.
La novela narra la historia de un hombre negro acusado injustamente de la violación de una mujer blanca, y los esfuerzos de un aplomado abogado, Atticus Finch, que desafía el racismo de su comunidad para defenderlo.
Para escribir el libro, que vendió 30 millones de copias en inglés y fue traducido a más de 40 idiomas. Al año siguiente ganó el Pulitzer y medio siglo más tarde la obra sigue siendo considerada una de las más emblemáticas de la literatura estadounidense del siglo pasado, además de ser lectura obligada en las escuelas norteamericanas y de otras partes del mundo.
La adaptación al cine de la novela se vio en las pantallas grandes en diciembre de 1962, y también fue un éxito de taquilla, lo que terminó de catapultar a la fama a la autora, que siempre le huyó a las cámaras y prefirió una vida austera y en familia.
