El perfil espía

De acuerdo con la Asociación de Control de Espionaje Industrial y sus Contramedidas, así como la firma Espionaje México, los espías infiltrados en las empresas tienen ciertas peculiaridades tanto de personalidad como de preparación profesional.
Espía profesional
Sexo: Femenino o masculino
Edad: 30 años en adelante
Estado civil: Indistinto
Escolaridad: Licenciatura, maestría o carrera universitaria trunca en áreas de ingeniería, administración, informática, sociología.
Formación alterna: Capacitación y entrenamiento permanente en programación neurolingüística (PNL), sociolingüística, lenguaje corporal, inteligencia, operación militar, psicología básica, psicología industrial, psicología social, informática, criminalística.
Historial crediticio: Evidente estabilidad económica.
Historial laboral: Puestos gerenciales o directivos de corta duración, desempeño en estructuras militares o de inteligencia oficiales.
Temperamento: Disciplinado, organizado, carismático, ambicioso, informado, con alta capacidad de adaptación y empatía a todos los ambientes laborales.
Ideología: Liberal
Habilidades: Logística, autocontrol, resistencia física.
Espía subcontratado
Sexo: Femenino o masculino
Edad: De 21 a 35 años
Estado civil: Soltero
Escolaridad: Bachillerato, con bajo desempeño académico
Formación alterna: Conocimiento autodidacta en armas, organizaciones policíacas, militares y de inteligencia
Historial crediticio: Dificultades económicas, sueldo bajo, mal administrado, sin fuentes alternas de ingreso
Historial laboral: Excluido o rechazado de alguna institución policial, sin oficio definido, con persistente inestabilidad laboral.
Ideología: Liberal
Temperamento: Solitario, romántico, excéntrico, con inclinaciones o aspiraciones por desempeñarse como escritor, músico o fotógrafo, actividades que tal vez son sus pasatiempos.
Habilidades: Matemáticas, ajedrez, crucigramas y otros que impliquen un reto mental.