Un sondeo de la Universidad de Michigan mostró que la confianza del consumidor se desplomó en marzo y las preocupaciones sobre la inflación se dispararon. Preocupa que los aranceles generalizados del presidente Donald Trump, que han desatado una guerra comercial en varios frentes, eleven los precios y socaven el crecimiento.
Los tres índices se encaminan a caídas semanales, con el referencial S&P 500 en camino de su cuarta semana consecutiva de descensos, su racha de pérdidas semanales más larga en siete meses. El Dow está aproximadamente un 9% por debajo de su reciente máximo histórico y, si se mantienen las pérdidas, podría registrar su peor semana en dos años.
Los mercados financieros mundiales se vieron sacudidos por la volatilidad a lo largo de la semana, con el S&P cayendo a territorio de corrección, desprendiéndose de 4 billones de dólares. El Nasdaq, de gran peso tecnológico, ya había entrado en territorio de corrección la semana anterior.
La incertidumbre derivada de las incoherentes políticas arancelarias de Trump ha ensombrecido las perspectivas de inversión.
"Aunque puede que nos estemos acostumbrando al caos, sigue pareciendo que la política (estadounidense) se está aplicando de forma desordenada", dijo Art Hogan, de B Riley Wealth. "Es un rebote técnico en un mercado sobrevendido".
Los inversores acudían en masa a activos de refugio como el oro XAU=, que superó por primera vez la barrera psicológica de los 3,000 dólares. Las acciones de las mineras cotizadas en Estados Unidos subían: Barrick Gold, 1.4%; Gold Fields, 1%; y Sibanye Stillwater, 3%.