Cambio de empleo ¿por dinero o por amor?
El 81% de los mexicanos que actualmente tiene una plaza desea encontrar un mejor trabajo este año, según una encuesta del portal de reclutamiento Monster.com.mx . ¿Qué pasa cuando esa oportunidad llega y la persona recibe una contra oferta de su actual empresa? Si la acepta, su imagen como profesional puede perjudicarse.
La situación que se vive en el mercado laboral ha propiciado una mayor rotación en las compañías, en este tema las personas deben ser cuidadosas.
Cuando un reclutador te busca, y aceptas otra oferta, estás iniciando un camino sin retorno. No es recomendable retractarte porque la organización que pretendes dejar te ofrece algo nuevo, esas acciones dañan tu carrera, la cual es parte de tu patrimonio personal, indica un artículo publicado por la firma de selección de ejecutivos Ray & Berndtson.
El candidato debe ser honesto respecto a lo que busca profesionalmente. Si salió a buscar otra posición es porque ya no desea estar en su lugar actual, quizá por lo económico, por la falta de retos o el clima laboral, expresa la consultora de la línea de negocios de ingeniería para Adecco México , Irelda López Díaz,
"Si esas fueron las condiciones que lo llevaron (...) a salir" entonces porqué habría de quedarse por una contraoferta, si el panorama en la empresa quizá no cambiará. Para este tipo de decisiones, lo económico no debería impulsar 100% la decisión de quedarse.
A decir de la entrevistada, en el país una de cada 10 personas (en promedio) recibe una contra oferta, y eso sucede cuando se invirtió mucho en ella por concepto de capacitación o porque tiene contactos claves con empresas donde la relación es sumamente complicada.
La disyuntiva en esos casos es: "si dejamos ir al empleado, el vínculo con el de afuera se pierde". La decisión de retener a alguien se deja para los recursos humanos, teniendo en mente que su salida "va apegar mucho en la estructura", expresa Irelda López.
Me quedo...me voy
Para la directiva de Adecco México, el perfil del empleado contra ofertado es claro: son gente que conoce muy bien a la organización, y aunque se dice que nadie es irremplazable, la empresa sabe que le llevará bastante volver a formar a un trabajador; es cuestión de dinero y tiempo a invertir. Por ello, si detecta que perderá más dejándolo ir que concediéndole algún apoyo entonces buscará retenerlo.
Si ese es tu caso y te encuentres frente a la disyuntiva de emigrar o quedarte en tu lugar de empleo, considera las siguientes recomendaciones de los especialistas:
1. Conflictos a largo plazo. La mayoría de veces la contra oferta implica dinero extra, eso puede significar problemas a futuro porque el jefe se queda resentido al tener que pagar más. Si los compañeros se enteran, la situación se vuelve complicada, se cuestionan ¿porqué a él sí un aumento y a nosotros no? Así que el empleado termina marchándose posteriormente o llega un sustituto.
2. No todo lo que brilla es oro. Según un estudio de la consultora de gestión de recursos humanos, Accetis Internacional , a veces las negociaciones para quedarse en el puesto se centran en un nuevo coche o un ligero aumento, beneficios que no aportan nada a la carrera profesional. Como empleado debes analizar si permanecer en ese trabajo (por el momento) y rechazar otros será valioso para tu desempeño futuro, señala dice la psicóloga del trabajo, Berenice Espinoza.
3. Pon tus motivos en una balanza. "Quedarse en la compañía sólo por lo económico es el tipo de cuestiones que trasciende en el mercado y la imagen del profesionista puede dañarse", añade Espinoza.
El dinero no es un motivador a largo plazo, por ello los jefes deben, a su vez, ser prudentes en este tipo de oferta. Si al empleado le desagradan otros factores, como el ambiente laboral, terminará por irse y en menos de un año. O bien la empresa contratará a alguien más porque la persona rompió con la lealtad del grupo y buscó otra oportunidad afuera. "De alguna manera pierden confianza en ti", detalla Irelda López.
4. "Sí, quiero quedarme". En caso de aceptar la contra oferta, la representante de Adecco sugiere que ésta sea por escrito y estipule:
Además del monto acordado (cuando la decisión es monetaria) una especie de plan de carrera de la empresa para el empleado, es decir, ¿cómo me garantizas que voy a crecer ahí? En la contra oferta hay que buscar "todo el paquete".
Por su parte, el candidato no debe perder de vista bajo qué características será ese acuerdo y si la nueva oferta cumple con los objetivos que él tenía cuando decidió buscar otro trabajo.
La persona deberá trabajar para ganarse otra vez la confianza de la empresa y hacerles ver que su decisión de mirar hacia otro empleo era por un crecimiento profesional. El hecho de que se quede implica que sigue teniendo la camiseta puesta, pero ahora sí de manera justa y satisfactoria para ambos lados.