5 pasos para ser un trabajador ‘modelo’
El interés de los empleados por permanecer en su trabajo ha cambiado. Se muestran comprometidos, pero no porque haya gran motivación laboral , sino por temor a no encontrar otra opción.
Cinco de cada 10 trabajadores en el país reconoce que su crecimiento profesional se ha detenido, refiere el estudio Global Workforce Study 2010, realizado por la consultora Towers Watson, entre 20,000 profesionistas.
La recesión ha dejado una huella importante en la mente de los empleados mexicanos, que si bien su prioridad es el tener la seguridad de su trabajo, por otro lado, es muy importante el contar con las suficientes oportunidades de desarrollo profesional y tener un crecimiento económico.
La investigación, aplicada en 22 mercados alrededor del mundo, apunta a la recesión económica como unos de los principales desmotivadores de los empleados. Aunque detrás de esa apatía laboral puede haber otros motivos, como la personalidad que se tiene para enfrentar los problemas laborales.
"Como empleado, el mexicano suele ser dependiente, paternalista y poseer una baja autoestima, resultado de una crisis de identidad cuyo origen puede ser rastreado incluso a la época de la Colonia", señala la académica de la Universidad Iberoamericana, Geraldine Calvo Zuckerman.
Al jefe muchas veces se le ve como un explotador que se aprovecha de sus empleados , a la vez que éstos esperan que la empresa, de forma maternal, les resuelva todas sus necesidades. "La realidad es que muchos líderes no entienden cómo tienen que motivar a sus empleados ni las razones por las cuales no reaccionan a los incentivos que se les dan", indicó la académica.
Por ello, si llevas algún tiempo en tu puesto actual, sientes que te has estancado y no eres reconocido por tu entorno laboral, considera estos consejos sugeridos por el portal de reclutamiento Trabajando.com, para empezar a tener un mejor desempeño:
1. Inversión personal. Para que los demás (incluidos superiores y colegas) te reconozcan, debes primero reconocerte a ti mismo; haz una lista de los objetivos que has logrado hasta el momento y la forma cómo lo has hecho. A su vez, analiza qué habilidades personales y talentos te han permitido llegar a esas metas y cómo podrías mejorar esas destrezas para sacar adelante proyectos en los que te has ‘enfrascado'.
2. Pon de tu parte. Para comenzar con el pie derecho, debes destacar en los aspectos básicos de un buen profesional. Empieza por cuidar tu presentación personal , respetar los horarios y a tus compañeros de trabajo. Intenta hablar sólo en el momento en que sean necesarias tus palabras o cuando alguien requiera de tu experiencia. No hables por hablar, ni busques parecer un ‘sabelotodo', en especial si estás con tus jefes.
3. Busca innovar. Un buen "elemento" es aquel que entrega lo mejor de sí a la empresa donde trabaja. Intenta contribuir con tus conocimientos y experiencia en favor de tu empleo, busca ideas innovadoras que podrían ser aplicables a éste. De palabras no se vive, aporta valor con un plan que incluya acciones y proyectos concretos, con fechas y objetivos claros. Esa es una forma de demostrar compromiso.
4. Enfócate en las metas. Recuerda que estás en ese lugar para trabajar, no para ser testigo ni opinar de la vida de los demás, por ello es muy importante evitar hablar mal de cualquier persona en la empresa . Recuerda que nunca se sabe quién será el destinatario final de esa conversación de pasillo y nadie quiere transformarse en "ese" compañero que todos tratan de evitar. Mantente al margen de estos conflictos.
5. Capacitación continúa. Hay que entender que puedes dar un plus en la medida que sabes lo que haces, así que el entrenamiento no está a discusión, debes invertir en tu desarrollo profesional y personal, y eso implica buscar la manera de actualizar tus conocimientos, aunque no siempre la empresa te apoye en ellos.
Una maestría, cursos, inscripción a un medio especializado, clases de idioma, todo ayuda, pero debes identificar qué te puede apoyar para convertirte en ese indispensable que, aunque no se le reconoce de esa manera, cuesta trabajo despedir por el valor que aporta.