MBA más incluyentes con mujeres
Los mexicanos ven al posgrado como una herramienta para mejorar su situación laboral. En México, ocho de cada 10 personas consideran que la maestría genera ese efecto, según una encuesta del portal Trabajando.com.
La oferta de posgrados es bastante amplia. Entre estos, los programas de administración y dirección de empresa (MBA) se han convertido en los favoritos, no sólo de los hombres -que tradicionalmente predominan en las aulas de escuelas de negocio- sino que las mujeres están buscando su lugar en esta especialidad que permite aumentar entre 10% y 82% el sueldo percibido, según un informe de la Oficina de Estadísticas Laborales de Estados Unidos, con datos del sitio Salary.com.
Datos de la asociación MBA Mujeres de México muestran que las mujeres representan alrededor del 23% de los mexicanos graduados de este programa al sumar varias escuelas de negocios en el extranjero, como Kellog, Harvard Business School y Wharton, de la Universidad de Pennsylvania.
En Estados Unidos, la Tuck School of Business registró en el 2011 la matrícula más alta de mujeres en su MBA, con el 35% de las 2,000 solicitudes. En México también hay avance en este tema: en la Universidad Anáhuac la proporción de alumnos en MBA hace una década era 20% mujeres-80% hombres; esa relación actualmente es 30%-70%.
Cifras de la Asociación Mexicana de Mujeres Ejecutivas añaden que hay tres alumnas por cada 100 estudiantes en este tipo de maestrías.
Aunque lento, estos números confirman que las mujeres están optando por un MBA. La MBA Mujeres de México informa que tanto para las mujeres como para los hombres uno de los principales obstáculos al aplicar a este tipo de formación es contar con los recursos financieros para cubrir el programa; sin embargo, las mujeres señalan a la "presión social" como otra limitante.
Una encuesta de la consultora Catalyst indica en uno de sus estudios sobre mujeres en el mercado laboral que entre los graduados de MBA entre 1996 y 2007 en Estados Unidos y Canadá, sólo el 31% de las mujeres recibió un ascenso comparado con el 36% de los hombres . Sin embargo, las mujeres que llegaron a puestos de liderazgo era el triple con relación a varones (19% contra el 6%).
Las propias escuelas de negocios encuentran en las mujeres un sector atractivo en crecimiento paulatino. Las mexicanas aseguran que les interesa tomar este programa para mejorar su crecimiento profesional, ganar experiencia, adquirir nuevas habilidades y dar un giro de carrera, de acuerdo con encuestas del MBA Mujeres de México.
Las Universidades no desdeñan esas inquietudes y las traducen en acciones para atraer mujeres a sus aulas.
La Rotterdam School of Management, en Holanda, tiene la iniciativa Women Empowering Women, que enseña a las mujeres sobre cómo apoyarse entre ellas mismas en el ámbito de negocios e interactuar en entornos de alta competitividad.
Su MBA incluye una práctica opcional en la montaña Kilimanjaro, en Tanzania, donde experimentan diversos entornos climáticos y deben aprender a trabajar en equipo.
La montaña se usa como una metáfora de los negocios. Durante varios días de caminata "se busca que las mujeres rompan sus propias fronteras personales y se den cuenta que puede realizar cualquier cosa en su vida personal y profesional. También entiende la importancia de construir una red poderosa de mujeres en quienes pueden confiar", dice en entrevista Dianne Bevelander, decano asociada de la escuela y principal organizadora de esta actividad.
A veces, los líderes son quienes deben convertirse en seguidores de alguien más y esto es un desafío, platica Bevelander. "En la montaña el líder del grupo cambia según las circunstancias y esto enseña a los participantes lo importante que suele ser dar un paso atrás y colaborar para lograr el éxito".
El proyecto se centra en que las mujeres observen cómo potenciar su propio desarrollo y el de otros para obtener mejores resultados. En otras clases, se estudia el estilo de liderazgo de un estudiante en particular para dar al grupo una idea de su impacto en su ámbito.
La escuela de Rotterdam ofrece ayuda financiera a los estudiantes cuya nacionalidad es la de menor demanda en el programa. Es una beca especial para impulsar la inscripción de alumnos internacionales que son minoría, como son los mexicanos. Hay que postular a la ayuda a través de un ensayo que cada año aborda diferentes temas.
La Kellog School of Management también tiene estrategias orientadas al público femenino. Cada año organiza un taller de liderazgo, para atraer a más estudiantes que estén en los primeros años de su desarrollo profesional y egresadas de carreras que, por su naturaleza, no estarían tan orientadas a cursar un MBA.
Si te trata de encontrar apoyos para financiar una maestra de este tipo, en el mercado existen diversas opciones.
Un ejemplo es Funed, que brinda préstamos para programas relacionados con negocios, economía, finanzas, ingeniería, arquitectura, ciencias políticas, administración, derecho, tecnologías de información, comunicación, marketing y desarrollo sustentable.
Al llegar al país sede, la organización deposita el 50% del préstamo y el resto se otorga a la mitad del programa si es que se entregan buenas calificaciones.