Querido jefe: estoy contento, pero me voy
Es la versión laboral del "No eres tú, soy yo": Cerca de la mitad de los empleados que dicen estar felices con sus empleos están pensando, no obstante, en renunciar.
Es lo que se desprende de una nueva encuesta que la firma de consultoría Mercer aplicó a 3,000 empleados representativos de un amplio espectro de la fuerza laboral en Estados Unidos.
Eso no sorprende teniendo en cuenta que la economía ha mejorado mucho desde entonces.
Pero lo sorprendente es que un alto porcentaje de los que dicen estar felices en su trabajo también piensan renunciar de todos modos, desmontando la hipótesis de que los empleados dedicados e involucrados en sus trabajos son más proclives a quedarse en ellos.
"El nuevo giro es que la inclinación de renunciar ya no está tan vinculada a la satisfacción de los empleados con sus trabajos, el sueldo e incluso las oportunidades de crecimiento", dijo Patrick Tomlinson, líder de talento en Mercer.
De hecho, entre el grupo que respondió que era probable que renunciara, entre 42% y 48% dijeron que estaban contentos con su compañía, su trabajo, su salario, sus beneficios, sus oportunidades y la gerencia.
Tal vez la decisión tiene que ver en parte con una creciente sensación de inseguridad en el trabajo. Un 42% dijo estar "preocupado" o "muy preocupado" por perder su trabajo.
Tal vez tiene que ver con la necesidad de un cambio tras ascender los peldaños de la compañía. Los gerentes senior (63%) se mostraron más proclives a contemplar la renuncia que los mandos intermedios (39%) y los empleados no directivos (32%).
O tal vez sólo tiene que ver con la edad y con el hecho de que los trabajadores más jóvenes todavía están explorando oportunidades en la vida. Los ‘millennials’ fueron los más propensos (44%) a decir que estaban considerando seriamente dejar su trabajo frente al 29% de las personas entre los 50 y 64 años.