Publicidad

Síguenos en nuestras redes sociales:

Publicidad

Rentas vitalicias: guía para saber si te convienen

Un ingreso mensual asegurado provee seguridad financiera y da tranquilidad emocional y psicológica; estos pagos tienen la garantía de no disminuir, aunque caiga el mercado.
vie 22 enero 2016 06:00 AM
Al cierre del primer semestre de este año, el 58.62% de los recursos se invirtió en valores gubernamentales. (Foto: Photos to Go)
jubilado pensionado viejo adulto mayor afore (Foto: Photos to Go)

Tal vez sepas que las anualidades inmediatas, también llamadas rentas vitalicias, proporcionan ingresos de por vida en la jubilación, ¿te gustaría entender mejor cómo funcionan y cómo elegir una?

Es comprensible que estas rentas vitalicias inmediatas ganen atractivo dado el reciente comportamiento de los mercados, en especial para las personas jubiladas o próximas al retiro.

A parte de la seguridad financiera que puede dar un ingreso mensual asegurado , estos pagos -que tienen la garantía de no disminuir sin importar cuánto caiga el mercado- también pueden dar tranquilidad emocional y psicológica. Varios estudios y encuestas revelan que los jubilados que tienen garantizado un ingreso en forma de una pensión o anualidad tienden a ser más felices en la jubilación que los que no lo tienen.

Sin embargo, incluso aquellas personas que podrían beneficiarse de una anualidad pueden ser reacias a invertir en una porque no la entienden bien. Así que empecemos con lo primero. ¿Cómo funciona exactamente una anualidad inmediata?

Aunque algunas pueden ser bastante complicadas, la premisa es bastante simple: entregas una suma de dinero a una compañía de seguros (o puedes comprarla a través de un agente, planificador u otro asesor) y a cambio la aseguradora se compromete a pagarte una cantidad determinada cada mes para el resto de tu vida.

El monto del pago que recibes depende de factores tales como la cantidad que inviertes, tu edad y el nivel de las tasas de interés. Usando una calculadora de pagos de anualidad verás que un hombre de 65 años de edad que hoy invierte 100,000 dólares recibiría pagos vitalicios de aproximadamente 560 al mes. Una mujer de 65 recibiría unos 535 dólares y una pareja donde ambos tienen 65 años obtendría alrededor de 475 dólares al mes (si uno de los cónyuges muriera, el sobreviviente seguiría recibiendo el pago).  

Publicidad

Tal vez la idea de desprenderte de esos 100,000 (o cualquier cantidad que inviertas) no te guste, pues ya no tendrás acceso a ellos, y dudes en invertir la totalidad o la mayoría de tus ahorros del retiro en una anualidad inmediata.

Para crear un plan más flexible de ingresos de jubilación, también te gustaría tener suficientes ahorros invertidos en una cartera diversificada de fondos mutuos, fondos cotizados y similares para generar el crecimiento que te ayude a mantener tu nivel de vida a pesar de la inflación y para disponer de dinero en efectivo en casos de emergencia, gastos imprevistos y caprichos ocasionales.

En este punto, quizás todavía te preguntas qué fin tiene adquirir una anualidad para crear ingresos en la jubilación. Después de todo, podrías invertir tus ahorros por tu cuenta (o contratar a alguien que lo haga) y retirar las ganancias y el capital original según sea necesario. Y, a diferencia de una anualidad, con este enfoque tendrás acceso a todo tu dinero todo el tiempo.

Pero una anualidad ofrece dos cosas que no se consiguen mediante la inversión por cuenta propia. Una es la garantía de que recibirás tus pagos sin importar cuánto tiempo vivas y sin importar los avatares de los mercados financieros. Mientras que cuando inviertes por tu cuenta existe la posibilidad de que agotes tus ahorros si tus inversiones reportan un mal rendimiento o si vives más allá de la esperanza de vida.

La segunda cosa que ofrece una anualidad es proporcionar un mayor nivel de ingresos vitalicios de los que puedes obtener invirtiendo por tu cuenta a un determinado nivel de riesgo. Esto es así gracias a los llamados "créditos de mortalidad". Algunas personas que compran anualidades morirán antes que otras. Como resultado, las aseguradoras pueden transferir el dinero que iba a entregar a los que murieron antes y pasarlo a los que mueren más tarde.

Los actuarios de las compañías de seguros puede estimar el tamaño de dichas transferencias, o créditos de mortalidad, y factorizarlo en el pago de la anualidad. Por lo tanto, el pago que recibes de una renta vitalicia consiste no sólo en ganancias de inversión y el retorno de una parte de tu inversión original, sino también en estos créditos de mortalidad. Estos créditos constituyen un pago adicional o retorno que no puedes crear al invertir por tu cuenta.

Ahora bien, que una anualidad inmediata ofrezca tales beneficios no significa necesariamente que seas un buen candidato para adquirirla. Si tus ahorros son grandes y hay poca probabilidad de que los agotes mientras vivas, entonces probablemente no necesitas una anualidad.

Del mismo modo, si la pensión que recibirás de la Seguridad Social cubre la totalidad o casi la totalidad de tus gastos de vida durante la jubilación, es posible que ya tengas los ingresos asegurados que necesitas.

Pero si decides, ya sea por razones económicas o emocionales, que te gustaría complementar la Seguridad Social con ingresos adicionales garantizados, entonces la siguiente pregunta es cómo elegir la anualidad inmediata que más te convenga.

Compara primero los pagos de varias aseguradoras, pues a veces pueden variar de una compañía a otra más de 10%. Puedes obtener información y cotizaciones de una variedad de compañías de seguros consultando sitios como Immediateannuities.com y contactando a los departamentos responsables en firmas del ramo.

Tal vez te sientas tentado a elegir automáticamente la aseguradora que ofrece el pago más alto. No lo hagas. Tienes que fijarte en la capacidad de la compañía de seguros de cumplir con los pagos vitalicios, así que selecciona las aseguradores que reciben altas calificaciones de fortaleza financiera (por ejemplo, A+ o más) de calificadoras como A.M. Best y Standard & Poor’s.

Para una mayor seguridad, considera distribuir o dispersar tu inversión en una anualidad entre algunas aseguradoras de alta calificación.

Conclusión: Las anualidades inmediatas tienen algunas características únicas que, en las circunstancias adecuadas, pueden muy bien apuntalar tu seguridad en la jubilación.  Pero al igual que cualquier inversión, también tienen inconvenientes. Así que tómate tu tiempo (de hecho, algunas investigaciones muestran que no tienes que invertir en una anualidad recién te jubiles para aprovechar sus beneficios) y asegúrate de entender lo que ofrecen antes de comprar.

Dinero Inteligente
Suscríbete a nuestro newsletter de Dinero Inteligente

Publicidad
Publicidad