La educación financiera es un tema poco común en la familia, donde se suele hablar de todo menos de cómo manejar el dinero.
Prueba de ello es que el 65% de la gente dice que una sola persona maneja todas las finanzas del hogar, mientras que 24% lo hace con su cónyuge, según información de MasterCard México.
Aunque tu núcleo familiar sea pequeño y tengas o no hijos, desarrollar una buena cultura financiera es la mejor herencia que puedes dejar, pues ello impedirá futuros endeudamientos.
“Siempre es oportuno platicar abiertamente sobre los deseos e inquietudes financieras, así como los medios y herramientas que existen para lograrlas”, dice el director de Fóndika, Juan Carlos Pelayo.
Estas conversaciones son vitales a medida que los intereses, prioridades y poder adquisitivo de los miembros de la familia cambian a través de los años.
Para las parejas, los expertos recomiendan mantener cierta independencia financiera, y dejar los planes de dinero compartidos en un término mínimo.
“Es bueno que ambos sepan de dónde viene y a dónde va el dinero de la familia, conocerlo garantiza una situación justa y reduce la tensión de enfrentarse por temas económicos”, dice Pelayo.
La guía familiar financiera
- Para evitar conflictos en tu hogar causados por dinero, MasterCard te da algunos consejos de cómo hablar de este tema con los adultos de tu familia:
- En el caso de las parejas, asegúrate de que ambos tienen el tiempo y la energía suficientes para tratar cada uno de los temas y situaciones financieras. Si alguno de los dos está cansado o enfermo, elige otro día.
- Asigna tiempo para una conversación por separado si alguien tuvo un cambio en el trabajo o el estado de ganancias.
- Anímense unos a otros para hablar sobre cualquier tema financiero, como la necesidad de pedir dinero prestado.
- Asegúrate de eliminar cualquier distracción, como los televisores, los teléfonos, los localizadores, etc., cuando esté hablando de dinero.
- Manténganse unos a otros informados con frecuencia sobre los activos y gastos individuales, así como cualquier cambio para evitar sorpresas.
- Observa cuidadosamente tu situación financiera, haz un plan para permanecer próspero y apégate a él.
- Sé positivo y constructivo a la hora de resolver cualquier problema. Eviten culparse unos a otros por las diferencias financieras o problemas que pudieran surgir.
Cuando hablen de tarjetas, háganlo sobre cómo utilizarlas responsablemente. Es fundamental entender que la tarjeta de crédito no es dinero gratis.