El gobierno de Bolivia defendió la compra de un avión para el , el cual fue construido originalmente para el equipo de futbol inglés Manchester United.
La compra del avión –que costó poco más de 38,000 millones de dólares– ha desatado críticas porque en la última semana no han cesado las marchas y manifestaciones de obreros y maestros para solicitar un aumento salarial.
El ministro de Obras Públicas, Walter Delgadillo, salió al paso a las críticas al asegurar que era una inversión “fundamental para la seguridad del primer mandatario”. Y explicó que el avión en el que actualmente viaja Evo Morales es una "reliquia" de 1975.
El ministro de Finanzas, Luis Arce, dijo que en realidad habían tenido “suerte” en la compra del avión (un Dassault Falcon 900 Ex Easy) porque fue puesto en oferta luego de que el club de futbol inglés decidió no adquirirlo. El avión será usado para vuelos nacionales.
El gobierno de Morales negocia la compra de un segundo avión con Rusia, el cual costaría alrededor de 40,000 millones de dólares, el cual sería usado para vuelos trasatlánticos.
Las explicaciones de los ministros parecen no ser suficientes, ya que este jueves el ministro de la Presidencia, Óscar Coca, deberá comparecer ante tres comisiones de la Cámara de Diputados y explicarles a detalle por qué compraron el avión.