Suecia está de fiesta por la boda de la princesa Victoria

La celebración de cuatro días de la boda real sueca llega este sábado a su cúspide con la boda de la princesa Victoria con el plebeyo Daniel Westling, en la catedral de Estocolmo.
Luego de la ceremonia está planeado un banquete en el palacio, organizado por la reina y el rey.
Victoria, de 32, es la hija mayor del rey Carl XVI Gustaf, y la reina Silvia. Tiene dos hermanos, el príncipe Carl Philip y la princesa Madeleine.
Westling, de 36 años, dirige una cadena de gimnasios en la capital y conoció a la princesa cuando se convirtió en su entrenador personal. La pareja anunció su compromiso a principios del año pasado.
Luego de la ceremonia, Westling será llamado príncipe Daniel, duque de Vaestergoetland, anunció el palacio. Este es un honor que no había sido otorgado a un plebeyo desde la edad media.
Westling tuvo que prepararse para su rol y aprender acerca de la vida de la familia real.
“Estoy aprendiendo muchas cosas desde política hasta ciencia e historia, y también sobre casa, así que para hablar pasan muchas cosas”, dijo recientemente. “Quiero entender cómo funciona esta organización y cómo se llevan a cabo las tareas”.
Casarse con una princesa significa que Westilng deberá seguir los deberes oficiales de ella, algo para lo que él dijo que estaba preparado.
“La mayor tarea de la reina es apoyar al rey, y en mi caso, es apoyar la corona de la princesa en su trabajo”, dijo. “Si puedo hacerlo de la misma forma que lo hace la princesa, estaré más que satisfecho. Ese es mi objetivo a largo plazo”.
Westling proviene de un pueblo en Ockelbo, 193 kilómetros al norte de Estocolmo. Su herencia norteña, dicen muchos suecos, lo convierte en la pareja perfecta de Victoria.
“De acuerdo con la tradición sueca y los clichés acerca de la gente de diferentes partes del país, puedes creer en la gente del norte”, dijo el historiador Herman Lindqvist. “Son agradables, calmados. No hablan mucho. Son como rocas sólidas, y eso es lo que Victoria necesita –alguien realmente sólido en quien pueda confiar”.
La capital de Suecia, que se hace llamar a sí misma como “La ciudad del amor”, recibe la boda e invita a los turistas a visitarla.
La tienda de recuerdos de Asa Norberg, ubicada en el corazón de la parte antigua de Estocolmo, dijo que espera que la boda estimule los negocios luego de que perdió cerca de un tercio del volumen habitual de clientes durante la reciente crisis financiera.
“Esperamos que la boda sea muy buena para nosotros y para Estocolmo”, dijo.
El propio Westling dijo que esperaba que el evento tuviera un impacto positivo en la ciudad.
“Por supuesto que estamos muy felices y orgullosos de que Suecia haya elegido volverse grande y sea visto como una oportunidad de mostrar a Suecia y a Estocolmo al mundo y los turistas”, dijo. “Pensamos que será un día fantástico”.
Bodas reales con plebeyos
Cerca de 1,200 invitados acuden a la boda, incluidos miembros de las familias reales del mundo, desde Bélgica hasta España , Japón, Jordania y Mónaco .
La familia real británica es representada por la hija de la reina Elizabeth, y por el príncipe Edward y su esposa Sophie, condesa de Wessex.
Muchos de los invitados saben bien lo que son los matrimonios fuera del círculo real. El príncipe Frederik de Dinamarca, conoció a su esposa la princesa Mary, durante los juegos olímpicos de 2000 en Sydney cuando ella trabajaba como ejecutiva de publicidad.
El príncipe Haakon de Noruega, se casó en 2001con la estudiante y entrenadora de voleibol, Mette-Marit, quien ya era madre. Ahora es princesa.
La propia madre de Victoria era una plebeya antes de casarse con el rey. Ambos se conocieron en 1972 en las olimpiadas de Munich, donde Silvia trabajaba como intérprete y anfitriona. Se casaron en la misma catedral que su hija.
Buenas noticias luego de muchas malas
La boda parece ser traer una dosis de buenas noticias para una familia que ha soportado varios escándalos este año.
La princesa Medeleine, hermana de Victoria, terminó su compromiso con Jonah Bergstrom en marzo luego de que la prensa reportara que él tuvo una relación “íntima” con una estudiante de colegio.
La prensa sueca había especulado sobre las altas y bajas de su relación, con reportes de Bergstrom viviendo noches de fiestas salvajes en clubes exclusivos de Estocolmo en 2005, según el diario Aftonbladet.
Un estudio reciente de la Universidad de Gothenburgo, mostró que 22 por ciento de los suecos quieren abolir la monarquía, 15 por ciento más que hace seis años. El escritor Goran Hagg propuso recientemente en una entrevista con TV4 que el rey debería ser elegido en una votación pública.
Cerca de 60,000 personas se han unido a un grupo en Facebook llamado “Rechazo pagar por la boda de Victoria”, el cual se preocupa por el uso de dinero público para pagar nupcias.
El observador real John Lindwall dijo que Victoria y su prometido tuvieron que enfrentar muchos obstáculos para llegar a su gran día.
“Fue amor imposible desde el principio”, dijo. “Nadie estaba a favor de esto excepto Daniel y Victoria, pero este sábado en la iglesia el cuento de hadas se hará realidad, y por una vez tendrá un final feliz”.