Chávez: "Uribe es un mafioso que sólo busca el conflicto"

El presidente venezolano, Hugo Chávez, acusó a su homólogo colombiano, Álvaro Uribe, al que calificó de “mafioso”, de querer “generar un gran conflicto” entre ambos países y obstaculizar la labor del gobierno entrante de Colombia.
“Es en verdad un mafioso (Uribe), es capaz de cualquier cosa en los últimos días que le quedan (...) está lleno de odio”, dijo Chávez, durante una acto oficial transmitido en cadena nacional obligatoria de radio y televisión.
Así se refirió a la presentación que hizo el ministro colombiano de Defensa, Gabriel Silva, de unas supuestas pruebas de que importantes líderes guerrilleros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) están refugiados en Venezuela.
"No vamos a caer en provocaciones, pero eso no significa que vamos a quedarnos callados ante el atropello", agregó el presidente venezolano, quien ordenó hoy llamar a consultas a su embajador en Bogotá, Gustavo Márquez.
Chávez afirmó que esas nuevas acusaciones “responden al desespero de la derecha que rodea a Uribe” y busca, en su opinión, impedir que el próximo presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, “vuelva a establecer relaciones respetuosas con Venezuela”.
En este sentido, reiteró que su gobierno está dispuesto a establecer relaciones con el “hermano” país basadas en el “respeto” con el nuevo gobierno que asumirá el 7 de agosto.
Este cruce de declaraciones agudiza las tensiones bilaterales, que aumentaron en el último año con la firma del acuerdo militar por el que fuerzas estadounidenses pueden utilizar al menos siete bases colombianas en el marco del combate al narcotráfico y el terrorismo.
Antes de esa firma, en julio de 2009, Chávez "congeló" las relaciones, incluidas las comerciales, con Colombia, que por ello perdió uno de los principales mercados de exportación.
El canciller venezolano, Nicolás Maduro, dijo este viernes, tras anunciar el llamado a consultas del embajador en Bogotá, que el gobierno venezolano mantiene una “constante evaluación” de la situación con Colombia y que en base a ella tomará “una serie de medidas políticas y diplomáticas”, entre ellas la asistencia o no de Chávez a la posesión de Santos el próximo 7 de agosto.