John Boehner podría convertirse en el tercer hombre más poderoso de EU

Con los republicanos al mando de la Cámara de Representantes, una nueva estructura de poder surgirá en las próximas semanas.
Quien podría ser el sustituto de Nancy Pelosi en la Cámara, John Boehner, está cerca de convertirse en el tercer hombre más poderoso de Estados Unidos, sólo debajo del vicepresidente y el presidente Barack Obama.
En tanto, ya está preparado para liderar la agenda de su partido , que promete recortar el gasto, la derogación del programa de atención de salud del presidente Obama e impulsar los recortes impositivos para las pequeñas empresas, lo que, dicen, permitirá el crecimiento del empleo.
Boehner es conocido como un fiscal conservador, que hizo de las reformas al gasto un punto clave en su campaña por la dirigencia de la Cámara.
Con la posibilidad de que los votantes estén molestos por lo que podrían interpretar como un gasto fuera de control en Washington, Boehner, recordó a los reporteros que él nunca ha pedido fondos especiales para proyectos específicos con exenciones fiscales (earmarks) para su distrito, en Ohio.
También ha sido un recaudador de fondos de gran alcance para su partido, lo que ha solidificado su posición.
A medida que la magnitud de la toma de posesión republicana era cada vez más evidente, Boehner, emocionado, dijo a sus seguidores, "en todo el país en este momento, estamos presenciando un rechazo a Washington. El repudio hacia el gobierno es grande y los políticos se niegan a escuchar a la gente", dijo.
"Él es el indicado. Realizará un papel no visto desde Tip O'Neill", dijo el estratega republicano Mary Matalin.
Boehner, que probablemente sea nombrado portavoz de su partido cuando el Congreso regrese, el 15 de noviembre, dijo dos veces durante su discurso que, a pesar de una abrumadora victoria republicana, no es tiempo para confiarse.
“Escuchen, voy a ser breve, porque tenemos trabajo que hacer, y este no es el tiempo para celebrar, no cuando uno de cada 10 de nuestros conciudadanos no tienen trabajo, no cuando hemos enterrado nuestros hijos bajo una montaña de deuda'', dijo Boehner.
Y mientras, Boehner ya está utilizando la victoria republicana como ventaja frente a la Casa Blanca.
"Esperamos que el presidente Obama ahora respete la voluntad del pueblo, cambie de rumbo, y se comprometa a realizar los cambios que exigen. En la medida en que está dispuesto a hacer esto, estamos dispuestos a trabajar con él", agregó.
Boehner siguió la mayor parte de los resultados de la noche anterior con su esposa Debbie, en el centro de mando del Comité Nacional Republicano en el Grand Hyatt Hotel de Washington, donde también comenzó a llamar a los republicanos que ganaron.
Incluso se comunicó vía Skype con sus seguidores del Partido del Té a quienes prometió no defraudarlos y fue ovacionado por la multitud.