El dalái lama apoya al disidente Liu Xiabo, premio nobel de la paz
El líder espiritual del Tíbet, el dalái Lama, quien inició una visita a Japón que podría coincidir con la presencia del líder chino Hu Jintao en una cumbre regional, reiteró el sábado su apoyo a Liu Xiabo , el encarcelado disidente chino y reciente ganador del Nobel de la Paz.
Las relaciones entre Japón y China se han enfriado desde septiembre, cuando Tokio detuvo al capitán de un barco chino que colisionó con patrullas japonesas cerca de unas disputadas islas en el este del Mar de China, el lugar de reservas de gas y petróleo.
"En su movimiento, (Liu no está) derrocando al Gobierno, sino intentando generar mayor apertura, más responsabilidad", dijo el dalái lama a periodistas en Narita, cerca de Tokio.
"Que China siga siendo una sociedad hermética es perjudicial para lograr grandes avances en cuanto a temas globales (...) Tarde o temprano, China, tienes que abrirte, es la única manera", afirmó el líder exiliado de 75 años.
China expresó su irritación por el premio otorgado en octubre a Liu , quien cumple una condena de 11 años de prisión por cargos de subversión debido a su rol de apoyo a la democracia, y advirtió a las naciones europeas que respaldarlo sería visto como una afrenta al sistema legal chino.
El mes pasado, el primer ministro japonés, Naoto Kan, dijo que sería "deseable" que China libere a Liu, pero no hizo un llamado explícito para su excarcelación.
Existe una creciente especulación respecto a si Kan y Hu, líderes de las dos mayores economías de Asia, se reunirán en los márgenes de la cumbre de la semana próxima del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), que se llevará a cabo en Yokohama, cerca de la capital japonesa.
El dalái lama, quien ha pedido por la liberación de Liu, ganó el premio Nobel de la Paz en 1989, el mismo año de la represión a las protestas pro democracia en la plaza de Tiananmen.
Entre el 12 y el 14 de noviembre, el dalái lama participará en una reunión de laureados con el premio Nobel en la ciudad de Hiroshima, en el oeste de Japón. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, quien recibió el Nobel de la Paz el año pasado, posiblemente no asistirá.
