Un joven quedó atrapado en su primer día en la mina neozelandesa

Uno de los 29 trabajadores atrapados en una mina de carbón de Nueva Zelandia es un adolescente que sólo tenía en el trabajo una hora cuando una explosión derrumbó la mina.
Joseph Dunbar celebró su cumpleaños 17 el jueves pasado, de acuerdo con informes de prensa del país. Su madre, Philippa Timms, dijo al periódico New Zeland Herald que ella y su hijo se habían mudado recientemente a la zona en el sur de Nueva Zelanda, para comenzar una nueva vida.
"Nos mudamos aquí por Joseph, para darle una vida diferente, una mejor vida", la citó el Herald. El objetivo principal de su hijo pronto se convirtió en obtener un trabajo en la mina, dijo.
"Fue un punto de inflexión en su vida, iba de ser un poco caprichoso (...) Se le ofreció esta oportunidad para tener una carrera, y así es como lo vio", la citan en un reportaje en el sitio de internet de TVNZ.
El adolescente iba a comenzar su nuevo trabajo el lunes, pero el viernes fue a la mina para una presentación y luego se le preguntó si se quedaba durante el resto de la jornada, de acuerdo con informes de noticias.
"Él quiso quedarse ahí y ver cómo funcionaba todo. Sólo quería ser parte de eso", dijo a TVNZ Gary Campbell, pareja de Phillippa Timms.
Una explosión derrumbó la mina de Pike River la tarde del viernes. No se han tenido noticias de los mineros desde entonces. El gas tóxico permanece y obstruye los esfuerzos de rescate. Los rescatistas esperaban introducir pronto un robot a la mina.
Timms le dijo al Herald que su hijo había trabajado en un supermercado, pero quería la carrera que ofrece la minería.
"Significaba todo para él. Se fijó una meta, y lograr ese objetivo significaba todo para él. Significaba que iba a viajar con la empresa, lo llevarían a diferentes lugares. Él estaba absolutamente feliz. Estaba emocionado, estaba extasiado", la citó el Herald.
Timms dijo que su hijo había pasado su cumpleaños con ella. Salieron de compras y a cenar, y luego rechazó las llamadas de sus amigos para salir en la noche y para quedarse en casa y preparase para el trabajo.
"Sus amigos querían salir con él esa noche, pero dijo 'me voy a quedar aquí. Tengo trabajo en la mañana'. Estaba muy contento", dijo su madre.
Timms dijo que no ha perdido la esperanza de que su hijo y los otros 28 mineros se encuentren con vida, pero ella se está preparando para lo peor. "Cuando vi la inclinación del pozo, la manera en que todo estaba negro, pensé 'no'. Porque para lo que entiendo de eso… supe que fue una explosión muy fuerte", la citó TVZN
Pero ella dijo que no se arrepiente de dejar a su hijo trabajar en la mina.
"No se trata de la negatividad de lo que pasaría si… Era lo que él quería hacer", dijo ella, de acuerdo con TVNZ. "Verlo tan feliz y orgulloso como estaba antes de bajar ahí, eso es lo que se permanece contigo".