En medio de un ambiente de tensión pero con relativa facilidad, un primer grupo de policías y soldados de Brasil ingresó este domingo a las principales zonas de las favelas (barrios pobres) del complejo de Alemao, en Río de Janeiro, donde se esconden miembros de pandillas de narcotraficantes que supuestamente provocaron disturbios en la ciudad desde el martes pasado.
El ingreso ocurrió alrededor de las 08:00 horas (local) en medio de disparos y cuando un helicóptero de la Policía Militar sobrevolaba a ras del suelo la favela. Vehículos blindados de la Armada abrieron el camino. Aún así, las fuerzas de seguridad no encontraron obstáculos.
"No hubo la resistencia que esperábamos", declaró el comandante de la Policía Militar de Río de Janeiro, Mario Sergio Duarte.
Las tropas ya ocupan los lugares estratégicos de la intrincada red de la favela que se desparrama desde lo alto de un cerro en el norte de la ciudad.
Más de 2,600 policías militares, civiles y federales, así como soldados
En la favela da Grota, una de las 15 que forman parte del complejo de Alemao, viven cerca de 40,000 personas.
La policía asegura que decenas de delincuentes expulsados de la favela vecina de Vila Cruzeiro se refugiaron en este sector.
La operación para desalojar a los narcotraficantes tiene como objetivo detener
El siguiente paso es continuar con una operación "de paciencia y mucho cuidado", adelantó Duarte. Los policías y soldados buscarán "casa por casa" a los narcotraficantes. Por ahora no hay informes sobre muertes o heridos.