Chávez convierte el Palacio de Miraflores en un albergue de damnificados
Unas 60 personas, integrantes de varias familias damnificadas por las lluvias caídas en los últimos días en Caracas , fueron recibidas este miércoles por el mandatario venezolano, Hugo Chávez, en un palacio anexo a la sede presidencial de Miraflores, donde vivirán en los próximos meses.
Chávez supervisó personalmente las instalaciones del edificio, que forma parte del complejo presidencial y donde fueron acondicionadas un total de 26 habitaciones, previstas para otras tantas familias que perdieron sus viviendas.
Las primeras 16 fueron recibidas este miércoles por el propio presidente que les dio la bienvenida en el llamado Palacio Blanco donde, según dijo, permanecerán un año, hasta que estén construidos sus nuevos hogares.
"Estamos comenzando a pasar revista. A partir de hoy esto se convierte en un barrio dentro de Miraflores", dijo el presidente, mientras inspeccionaba una habitación ubicada en los sótanos.
El jefe del Estado supervisó hasta el mobiliario de una de las habitaciones y ordenó que se cambiara de lugar un horno microondas porque estaba ubicado encima de una cuna portátil.
La idea, apuntó Chávez, es que estas 26 familias que están llegando a Miraflores sean reubicadas en menos de un año "en sus propias casas", que serán construidas cerca del palacio presidencial.
"He dado órdenes de desalojo. Si yo tuviera que desalojar mi propio despacho, lo hago. El palacio Blanco puede convertirse en súper bloque para que viva la gente aquí mismo", indicó el mandatario.
Señaló, asimismo, que no se necesita mucho espacio para realizar el trabajo de funcionario y por ello exhortó a los ministros de su gabinete que dejaran la "comodidad" y abrieran sus oficinas, al tiempo que invitó a los damnificados a sentirse como en casa en el complejo presidencial.
"Todo este palacio es de ustedes, no crean que van a estar presos o arrinconados (...); no van a estar bajo régimen militar, aunque veo algunos con cara de soldados (...) Bienvenidos si quieren ser soldados de Chávez", manifestó.
Aseguró a los afectados que la Navidad llegaría al palacio presidencial y que los niños tendrían sus regalos.
El presidente venezolano ordenó el domingo pasado que varias instituciones públicas se convirtieran en albergues, incluyendo a Fuerte Tiuna, gran complejo militar en Caracas, y a Miraflores.
Chávez también pidió a los "señores del sector privado" ponerse "la mano en el corazón" y ceder algunas propiedades, incluidas las destinadas a actividades recreativas y de ocio, como campos de golf.
Las fuertes lluvias que han afectado a la capital venezolana y varios estados del norte del país, han causado una veintena de muertos y más de 50.000 damnificados. EFE