Unas nueve personas han muerto por las inundaciones y lluvias en Australia
Las inundaciones estacionales de Australia han dejado a miles de personas sin hogar y unas nueve vidas se han perdido en todo el estado de Queensland, reportó este lunes el Departamento de Estado de Seguridad Comunitaria.
Esa cifra de muertos incluye tres muertes relacionadas con las inundaciones del último diluvio , y seis otros decesos de la temporada de tormentas que comenzaron el 30 de noviembre.
Las inundaciones - que se intensificaron desde hace una semana tras las lluvias del monzón que provocaron el desbordamiento de ríos al llegar a niveles récord- amenazan con cerrar una carretera e impedir el paso por ella, mientras los equipos de socorro se apresuran en la administración de suministros, informaron las autoridades este lunes.
La ciudad de Rockhampton se ha visto particularmente afectada, donde los niveles de agua siguen aumentando y amenaza con anegar la carretera al norte de la ciudad, donde habitan 75,000 personas.
Las cuadrillas de rescate seguirán llevando abastecimiento y suministros a Rockhampton "hasta que el camino se vuelve intransitable", dijo el oficial del estado de Queensland, Ian Stewart, en un comunicado.
El aeropuerto regional de la ciudad cerró este sábado por la tarde y podría permanecer cerrado durante las próximas semanas, informó el Departamento de Manejo de Emergencias de Queensland.
Los meteorólogos pronosticaron que podrían transcurrir varios días antes de que mejoren las condiciones.
El meteorólogo de CNN, Iván Cabrera, estimó que los niveles de agua podrían alcanzar los 9.4 metros de altitud en Rockhampton este miércoles.
En tanto, los residentes han apilando sacos de arena y han colocado láminas de madera en los escaparates, mientras esperan las crecidas de las inundaciones.
El primer ministro Julia Gillard instó a los residentes a mantenerse alejados de las aguas. El viernes pasado realizó una gira por la zona devastada y dijo que las inundaciones en Queensland costarán "cientos y cientos de millones de dólares".
Sarah Wiley y Michael Best contribuyeron con este reporte.