Un líder de Al-Qaeda decapitó al periodista Daniel Pearl, dice un informe
Un análisis exhaustivo de líneas de la mano corrobora la confesión de un alto líder de Al-Qaeda, acerca de que él decapitó personalmente al periodista Daniel Pearl, del Wall Street Journal, según un nuevo informe publicado este miércoles.
Khalid Sheikh Mohammed es sospechoso de planear los ataques terroristas del 11 de septiembre 2001 en Estados Unidos, y no ha negado su participación en el asesinato de Pearl, secuestrado en enero de 2002.
Un video del homicidio del periodista se difundió en línea casi un mes después del secuestro, pero el rostro del asesino que cortó su garganta no quedó a la vista.
Las autoridades de Estados Unidos no le han imputado a Mohammed los cargos por este asesinato de 2002.
"Yo decapité con mi bendita mano derecha la cabeza del judío estadounidense, Daniel Pearl, en la ciudad de Karachi, Pakistán", dijo Mohammed, de acuerdo con una transcripción del Pentágono difundida hace casi cuatro años. "Para aquellos que quieran confirmarlo, hay fotos mías en internet sosteniendo su cabeza".
El nuevo informe borra cualquier duda acerca de que Mohammed haya llevado a cabo personalmente la decapitación.
Los agentes de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) y los oficiales de la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos (CIA) utilizaron una técnica de comparación de líneas de la mano, para cotejar la mano del asesino en una fotografía con la mano de Mohammed, según el informe.
El sospechoso dijo al FBI que un agente de alto rango de Al-Qaeda le aconsejó tomar bajo su custodia a Pearl de sus secuestradores originales, según el informe.
Pearl fue secuestrado en su camino a lo que él creía que era una entrevista con un clérigo radical. Al menos 27 hombres jugaron un papel en el secuestro y el asesinato. Se cree que al menos 14 siguen libres, según el informe.
Se señala a tres diferentes grupos militantes como involucrados en el crimen, incluyendo a los secuestradores liderados por el británico-pakistaní Omar Sheikh y un equipo de asesinos dirigidos por Mohammed, según el informe.
El informe también destaca que las autoridades enfrentaron obstáculos en la investigación, incluidas las pruebas contradictorias.
Las autoridades pakistaníes liberaron a un guardia, que era un informante clave, y fallaron en el seguimiento a testigos claves, según el informe.
El Proyecto Pearl , elaborado por profesores y estudiantes de la Universidad de Georgetown en Washington, tardó tres años en concretarse y fue lanzado este miércoles por el Centro para la Integridad Pública.