La Unión Europea se dice decepcionada tras el diálogo nuclear con Irán
La máxima representante de la diplomacia de la Unión Europea expresó su decepción sobre los dos días de pláticas con Irán acerca del controvertido programa nuclear de la nación del Medio Oriente . Catherin Ashton informó que los seis países que asisten a las charlas, y que ella representa, se rehúsan a aceptar las condiciones demandadas por la delegación iraní.
"Tenía la esperanza de embarcarnos en una discusión como una forma práctica de avanzar", dijo. "Me decepciona decir que no ha sido posible".
Los cinco miembros del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (Rusia, China, Francia, Estados Unidos, Gran Bretaña), más Alemania, llegaron a la mesa de negociación en Turquía con una propuesta de intercambiar combustible por el reactor de investigación desarrollado por Teherán, una proposición que colapsó en la ronda previa de negociaciones.
"Esperábamos tener una discusión detallada y constructiva de esas ideas", comentó Ashton. "Pero quedó claro que el lado iraní no estaba listo, a menos de que aceptáramos condiciones sobre el enriquecimiento de uranio y las sanciones".
Las negociaciones reiniciaron el sábado por la mañana luego de que la sesión de apertura que duró hasta cerca de la media noche .
Funcionarios occidentales dijeron que durante la primera charla —que tuvo un ambiente contencioso— la delegación iraní parecía estar poniendo a prueba la unidad del G5+1.
Antes de que las discusiones comenzaran en el palacio otomano del siglo XIX, los funcionarios de Irán declararon que no aceptarían ninguna propuesta acerca de suspender su controversial programa de enriquecimiento de uranio.
Otro funcionario occidental dijo que el G5+1 rechazó en conjunto la propuesta de la delegación iraní en el sentido de que establecer precondiciones como que aceptaran que Irán llevara a cabo el ciclo nuclear completo y la suspensión de las sanciones impuestas en su contra.
En el 2010, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas impuso una cuarta ronda de sanciones contra Irán como castigo por su "falta de cumplimiento para garantizar la naturaleza pacífica de su programa nuclear".
Irán insiste en que sus instalaciones nucleares tienen el objetivo de desarrollar tecnología para cubrir necesidades energéticas y civiles.