Mubarak y opositores acuerdan trabajar en una reforma política para Egipto
El presidente egipcio, Hosni Mubarak, acordó discutir una reforma constitucional con los partidos que piden su salida del poder, de acuerdo con el anuncio emitido por el vicepresidente este lunes, un día después de que el Ejército informara que no atacará a los manifestantes pacíficos.
En un mensaje en la televisión estatal, el vicepresidente Omar Suleiman dijo que Mubarak le pidió comenzar a trabajar en una “reforma constitucional y legislativa” en colaboración con varios partidos políticos egipcios. Suleiman, el jefe de inteligencia designado vicepresidente el fin de semana, indicó que el paquete de reformas será elaborado “de forma expedita”.
“Los otros partidos también jugarán un rol, lo que llevará a una reforma política real”, dijo.
Poco después del anuncio, la oficina de Suleiman dijo a CNN que las pláticas ya comenzaron. No hubo detalles sobre las propuestas que se pondrán sobre la mesa, ni reacciones inmediatas de parte de líderes de la oposición o señales de qué partidos tendrán parte en el diálogo.
Al mismo tiempo, el gobierno parecía implantar restricciones a los viajes y las comunicaciones de cara a la marcha masiva que irá de El Cairo, la capital, hacia Alejandría, el martes. El servicio de trenes fue suspendido indefinidamente, los soldados se ubicaron en intersecciones clave y, de acuerdo con el Ministerio de Información, las redes de telefonía móvil serán interrumpidas por la noche .
El ejército anunció este lunes que reconoce “las demandas legítimas de los ciudadanos honestos” y no disparará contra manifestantes pacíficos.
“La presencia de fuerzas armadas en las calles de Egipto es por su beneficio, protección, seguridad y paz”, anunció un vocero no identificado en la televisión estatal. “Las fuerzas armadas no usarán la violencia contra el pueblo de Egipto, que siempre ha jugado un papel significativo en la historia del país”.
Mubarak ha gobernado Egipto durante casi 30 años, pero desde la semana pasada enfrenta una ola de protestas contra su régimen , que comenzaron después de que las protestas en Túnez acabaran con la dictadura.
El secretario general de la Liga Árabe, Amre Moussa, ex canciller de Mubarak, llamó este lunes a que el país lleve a cabo una transición pacífica “de una era a la otra”, reportó la agencia francesa AFP.
Mubarak no ha dado indicios de que accederá a las demandas para que deje el poder, aunque la semana pasada pidió a su gabinete que dimitiera. Encomendó al primer ministro Ahmed Shafiq formar un nuevo equipo de gobierno cuya tarea sea restaurar la seguridad y la confianza en la economía.