Human Rights Watch exige liberar al joven acusado de blasfemia en Pakistán
El gobierno paquistaní debe retirar de inmediato los cargos de blasfemia contra un adolescente y liberarlo de la cárcel, exigió Human Rights Watch.
"Pakistán ha establecido el estándar para la intolerancia cuando se trata del mal uso de las leyes contra la blasfemia, pero el enviar a la cárcel a un estudiante por algo que él escribía en un examen es verdaderamente lamentable", dijo Bede Sheppard, investigador sobre los derechos infantiles en Human Rights Watch, en un comunicado emitido el miércoles.
La policía de Pakistán dijo a CNN el martes que habían arrestado a un adolescente acusado de escribir comentarios insultantes sobre profeta musulmán Mahoma en un examen escolar.
Sami Ullah, de 17 años y residente de Karachi, fue denunciado por la junta escolar, según el oficial de la policía Qudrat Shah Lodhi.
Lodhi se negó a comentar cuáles fueron los supuestos comentarios de Ullah escritos en su examen de secundaria, por temor a violar la ley de blasfemia de Pakistán.
Ullah, el último pakistaní en ser acusado de blasfemia, es un musulmán, según la policía. El joven escribió los supuestos comentarios blasfemos en abril de 2010, dijo la policía.
No está claro por qué tardó meses la junta escolar en denunciar a Ullah, quien se ha disculpado por sus comentarios y pidió clemencia al tribunal, señalaron las autoridades policiales.
Human Rights Watch sostuvo en su comunicado que la Convención sobre los Derechos del Niño garantiza la libertad de pensamiento y de conciencia a cualquier persona menor de 18 años. Pakistán es signatario de los tratados internacionales, agregó.
En algunos reportes se ha denunciado que las autoridades de Pakistán han aplicado las leyes sobre la blasfemia contra los niños en ocasiones anteriores.
Las controvertidas leyes señalan que quien profane el nombre del profeta será castigado con la muerte o con la prisión de por vida.
La norma estuvo bajo los reflectores a finales del año pasado, cuando el político liberal paquistaní Salman Taseer fue asesinado a tiros después de dirigir una campaña pública para cambiar la legislación.
Taseer señaló que la ley de blasfemia se aplica de manera abusiva para perseguir a las minorías.
Reza Sayah y Nasir Habib contribuyeron con este reporte.