Policías de Argelia reprimen una manifestación inspirada en Egipto
Varias personas resultaron heridas este sábado en un enfrentamiento entre policías y manifestantes en Argel, donde miles de personas participan en una protesta para reclamar cambios al régimen de Abdelaziz Buteflika, según pudo constatar EFE.
Los reclamos se han extendido a otras localidades del país, como Bejaia, Constantina, Anaba y Orán, la segunda ciudad argelina, donde también se produjeron varios heridos y decenas de detenciones, informaron a fuentes de la Coordinadora Nacional por la Democracia y el Cambio (CNDC), convocante de las manifestaciones.
En la concentración de la capital, la policía cargó contra las cerca de 3,000 personas reunidas en las inmediaciones de la plaza del Primero de Mayo, después de que los manifestantes rompieran el cordón de seguridad e intentaran avanzar hasta el lugar del comienzo de la marcha.
La policía empleó porras para perseguir a los manifestantes y éstos respondieron con el lanzamiento de piedras. Se produjeron intercambios de golpes y, tras unos momentos de extrema tensión, los agentes lograron que los manifestantes volvieran a las calles adyacentes, donde ahora permanecen concentrados.
Según la opositora Reagrupación Constitucional Democrática (RCD), estos enfrentamientos se saldaron con varios heridos, como Efe pudo constatar.
Entre los manifestantes, hay al menos una quincena de mujeres de la Asociación de Madres de Desaparecidos en Argelia durante la década de los años 90, con las fotos de sus hijos, que aprovecharon la concentración para reclamar al Gobierno información sobre sus familiares, de los que no tienen noticias desde hace más de diez años.
Con gritos de "Buteflika lárgate" o "Estamos hartos de este poder", los manifestantes, muchos de ellos jóvenes de toda condición social, portan pancartas con lemas como "abajo el sistema" o "queremos un país gestionado por los jóvenes y no por los viejos".
La concentración ha levantado una gran expectación en el país, especialmente tras la caída este viernes del presidente egipcio, Hosni Mubarak.
Cerca de 30,000 policías se han movilizado, muchos de ellos trasladados desde otras regiones del país en autobuses civiles, para controlar la situación en Argel.