Un estudio sobre trabajadores de restaurantes en Los Ángeles, donde la mayoría son inmigrantes hispanos, mostró el
Este sector es fuente de ingresos para inmigrantes, trabajadores de minorías y empleados que no tienen formal calificación, así como a jóvenes que se han incorporado a la fuente laboral.
Este lunes, los Centros Unidos de Oportunidades en Restaurantes (ROC, por sus siglas en inglés) presentaron el estudio Detrás de la puerta de la cocina. Desigualdad y oportunidad en Los Ángeles, la más grande industria del restaurante en Estados Unidos.
En el evento fueron presentados los testimonios del cocinero Luis Hernández y de la mesera Nora García, quienes coincidieron en exponer un delicado panorama para los trabajadores en esta industria, dominada por la comunidad inmigrante.
“Ahora llevo ya varios meses desempleado y no encuentro trabajo en los restaurantes”, dijo Hernández, quien compartió que los hispanos han pasado a ser el hilo más delgado porque son los que más despiden y dan preferencia a empleados de otras razas.
La segregación ocupacional y discriminación prevalece en la región, en donde las comunidades inmigrantes y la raza afroamericana dominan en los malos trabajos y los anglosajones en los buenos empleos.
El 34.7% de los consultados reportó haber sido objeto de abuso verbal de sus patrones y que éstas se basaron en el perfil racial.
Aunque esta industria ofrece en Los Ángeles empleo a más de 276 mil trabajadores -casi uno de cada 10 trabajos que se tienen registrados en la región, pues concentra el mayor número de restaurantes en Estados Unidos-, muchos empleados reciben un salario base de 2 dólares 13 centavos por hora, que es el actual salario mínimo para trabajadores que reciben propinas.
En el estudio se encontró que 89.8% de los
La mayoría de los trabajadores reportaron abusos en el pago de sus horas extras y violaciones al salario mínimo, falta de capacitación en seguridad y salud.
El estudio forma parte de una petición para llamar al Congreso de Estados Unidos a que apruebe el Acta de Salarios HR 631, la cual, de aprobarse, sería la primera modificación de este tipo en los últimos 20 años.