Un juez de EU reserva información sobre el presunto agresor de Tucson
Un juez de distrito en Estados Unidos rechazó hacer públicos los objetos encontrados por las autoridades en la casa de Jared Lee Loughner, acusado de asesinato en Arizona, debido a que está en marcha una investigación federal sobre el caso y un gran jurado prepara una acusación.
La acusación puede estar lista para el 9 de marzo. En esa fecha, los medios que quieren conocer detalles del arresto podrán presentar nuevamente su solicitud, dijo el juez Larry Burns.
En otro asunto, el juez señaló que no emitirá un fallo sobre la petición de la defensa de prohibir la difusión de dos fotografías de Loughner, tomadas cuando la policía lo detuvo el 8 de enero.
Loughner , de 22 años, fue detenido acusado de disparar ese día contra una multitud afuera de un supermercado en Tucson, Arizona. En el incidente murieron seis personas y otras 13 resultaron heridas, entre ellas la congresista demócrata Gabrielle Giffords , quien se recupera en una clínica de Texas.
A principios de año, un jurado lo acusó de intentar matar a la legisladora y a dos de sus colaboradores. Él se declara inocente .
En la audiencia judicial de este viernes, a la que Loughner no se presentó, el juez dijo que permitirá que los medios pidan las fotografías. El juez fue asignado al caso después de que los jueces federales de Arizona se excusaron porque uno de sus compañeros murió en el tiroteo del que Loughner es presunto responsable.
Sus defensores públicos intentaron bloquear la difusión de las imágenes, luego de que la policía quiso divulgarlas el 7 de febrero a petición de 15 personas que recurrieron al Acta de Libertad de Información.
El juez, sin embargo, determinó que las imágenes no parecen comprometer el que el acusado tenga un juicio justo.
"No veo una seria amenaza a la posibilidad de que tenga un juicio justo si las dos fotos son publicadas", dijo Burns.
Además de la defensa de Loughner, los fiscales federales se oponen a la divulgación de las imágenes, bajo el argumento de que violan su derecho a la privacidad y a tener un juicio justo.
Una foto de Loughner sonriendo después de su detención, que ha sido ampliamente difundida por los medios, fue tomada en el condado de Pima, Arizona, tras el tiroteo.
El caso conmocionó a Estados Unidos y llevó al presidente Barack Obama a hacer un llamado a la unidad y demostrar que la violencia no forma parte de la cultura y la cotidianidad estadounidense.