EU acusa a China de detener a periodistas ilegalmente en las protestas
El embajador de Estados Unidos en China denunció este lunes que periodistas de su país y de otras naciones extranjeras fueron "ilegalmente detenidos o acosados cuando intentaban realizar su trabajo", mientras cubrían las protestas en el centro de Beijing durante este fin de semana.
El embajador Jon Huntsman Jr. dijo en un comunicado que un reportero fue "brutalmente golpeado y detenido durante varias horas".
"Hago un llamado al gobierno chino para detener a los autores responsables por acosar y agredir a personas inocentes y hacer que se respeten los derechos de los periodistas extranjeros que informan en China", agregó.
Los periodistas de CNN Eunice Yoon y Jo Ling Kent fueron físicamente hostigados por las fuerzas de seguridad de China este domingo cuando tenían previsto cubrir una protesta, que nunca se llevó a cabo, debido a la fuerte presencia policial.
Se les empujó, arrastró y algunas veces se les llevó fuera de la escena. Sus cámaras fueron confiscadas y sus materiales de archivo eliminados; una tarjeta de prensa le fue arrebata a Yoon, quien la tomó por la fuerza de nuevo, de un oficial que se negó a dar su nombre.
"Nos enteramos que muchos otros periodistas fueron tratados de la misma y, en algunos casos, mucho peor manera", escribió Yoon. "Un antiguo colega y amigo mío, Steve Engle de Bloomberg News, fue arrastrado a un callejón por varios policías que lo golpearon. Terminó en el hospital".
El Ministerio de Asuntos Exteriores de China no respondió a una solicitud de información por parte de CNN este lunes.
Este fin de semana varios organizadores prodemócratas pidieron manifestarse en diversas ciudades importantes de China , pero aunque el llamado se realizó anónimamente, los policías vigilaron las calles de Beijing.
Cientos de oficiales se movilizaron en 120 vehículos que inundaron el centro peatonal y comercial de Wangfujing, en la capital Beijing este domingo, donde presuntamente se realizaría un segundo intento de "protesta jazmín", acto inspirado en las manifestaciones prodemocracia en Túnez .
Cuando la policía desplegó las tácticas inusuales para impedir las manifestaciones, no había ninguna señal de éstas.
En la zona comercial de Wangfujing, un gran número de policías, vestidos de civil y con el uniforme, se distribuyeron en la zona. El lugar es normalmente conocido por atraer multitudes de turistas nacionales y extranjeros. Cada entrada estuvo custodiada por varios agentes este domingo.
Frente a un restaurante de McDonald's, donde presuntamente se reunirían los manifestantes, se inició la construcción de una obra grande días después del primer intento de la protesta. La edificación obstruye directamente la entrada a la plaza y al restaurante.
Cerca de allí, un grupo grande de barrenderos vestidos de color naranja se mantuvieron cerca de la zona de protesta, pero aunque estaban equipados con escobas, no barrieron la calle. A la hora que estaba prevista la protesta, dos camiones grandes de lavado de calles comenzaron a irrigar el agua por la vía principal, bloqueando el tráfico peatonal.
Los policías que estaban vestidos de civiles se sentaron por horas en restaurantes y en escaparates observando los alrededores, mientras que los oficiales uniformados obligaron a los periodistas y a los curiosos alejarse de los alrededores.
En Hong Kong, unos 25 ciudadanos que se organizaron en Facebook se reunieron en el centro de la ciudad, portando carteles y ramos de flores de jazmín. En las pancartas se leía: "Libertad y Democracia. Fin del partido gobernante. Exigimos una reforma política."
Uno de los convocados, Lam Ng, pidió el fin del gobierno de partido único. "No estoy de acuerdo con el gobierno chino", dijo. "No me gusta la corrupción".
En tanto, este domingo por la mañana, el primer ministro chino Wen Jiabao participó en su tercera plática en línea. Los usuarios que participaron fueron seleccionados previamente.
No hizo ningún comentario sobre las protestas previstas para la semana pasada o del domingo pasado.
Los esfuerzos para organizarla la primera protesta del domingo 20 de febrero fueron considerados una gran medida sin éxito por la ausencia de los observadores de derechos humanos y el número de policías que superaban a los manifestantes.
En aquella ocasión Huntsman vistió una chamarra de piel negra y en el hombro izquierdo estaba bordada la bandera estadounidense. Su imagen fue capturada en un video que fue muy visto en la plataforma YouTube y, al ser reconocido por la multitud, su nombre fue coreado en varias ocasiones. Uno le preguntó: "¿La esperanza de China se convertirá en caos?", en referencia a los disturbios que se han registrado en varios países de África y el Oriente Medio, en demanda de la democracia.
"Sólo vine a echar un vistazo", contestó Huntsman en mandarín.
Los provocadores lo acusaron de fingir no saber acerca de la protesta y de ignorancia.
El portavoz del embajador Richard Buangan dijo que Huntsman se encontró con la manifestación cuando él pasaba por la zona con su esposa, dos de sus hijos y su yerno.
"El sábado pasado (miembros de) la familia Huntsman se dirigían a visitar un museo de la Plaza de Tiananmen, que pasa a través del distrito comercial de Wangfujing. Los Huntsman caminaban a través de Wangfujing en el momento de los acontecimientos, fue pura coincidencia. Una vez que la familia se dio cuenta de una situación relacionada con la seguridad, inmediatamente se retiraron", dijo Buangan.
Jo Ling Kent contribuyó con este informe.