Occidente responde ante el llamado de la ONU de frenar la represión libia
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, advirtió al líder libio Moammar Gadhafi que debía parar inmediatamente la "brutal represión" sobre los civiles libios o que de lo contrario enfrentaría las consecuencias militares de la comunidad internacional. " Estos términos no son negociables", dijo Obama .
El anuncio del mandatario estadounidense se dio un día después de que el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas autorizara el uso de la fuerza para proteger a los civiles libios que se oponen al régimen de Moammar Gadhafi .
Barack Obama también dejó claro que no habría tropas terrestres de Estados Unidos en Libia, pero no fue el único líder mundial que reaccionó por la decisión de las Naciones Unidas.
El primer ministro de Canadá, Stephen Harper, dijo que su país enviaría aviones de combate CF-18, que se unirían a un buque de guerra canadiense en estado de alerta frente a las costas de Libia.
Del otro lado del Atlántico, el vocero del gobierno de Francia, Francois Baroin, dijo que su país planea participar en los esfuerzos internacionales contra el régimen de Gadhafi.
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, planeó una cumbre para el sábado para analizar la crisis en Libia. Los miembros de la Liga Árabe, el presidente del Consejo Europeo y los representantes que apoyaron la resolución del Consejo de Seguridad están invitados.
El primer ministro británico, David Cameron, dijo que Reino Unidos inició los preparativos para desplegar aviones en las próximas horas, los cuales se trasladarán a las bases aéreas que se han posicionado para llevar a cabo las acciones necesarias.
España ofreció a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) el uso de dos bases militares, y proveerá fuerzas navales y aéreas para ser usadas en territorio libio, informó la Ministra de Defensa, Carme Chacón.
Las bases que prestará España serán las de Rota, en donde también hay fuerzas estadounidenses y la de Morón de Frontera. El préstamo está bajo aprobación parlamentaria.
Alemania, uno de los cinco países que se abstuvo de la votación en el Consejo de Seguridad de la ONU, decidió que sus tropas no tendrían ninguna actividad en Libia, dijo el ministro de Asuntos Exteriores, Guido Westerwelle, quien explicó que su país cree firmemente que los que votaron a favor tienen buenas intenciones.
El Ministro de Exteriores de Italia, Franco Frattini, indicó que cerraría su embajada en Tripolí y que participarán activamente en el esfuerzo internacional de poner orden en Libia. El Ministro de Defensa, Ignazio La Russa, dijo que se pediría permiso al Parlamento para disponer de personal militar y aéreo.
La nación del Mediterráneo, Malta, confirmó que no permitiría que su territorio sea utilizado para reforzar la zona de exclusión aérea sobre Libia .
En Noruega, el ministro de Asuntos Exteriores, Jonas Gahr Store, calificó la resolución del Consejo de Seguridad como histórica y dijo que demuestra la capacidad de las Naciones Unidas de emprender acciones específicas.
El gobierno de Moscú confirmó que su país no participaría en una operación militar. Rusia, junto con Alemania, Brasil, India y China, fueron los únicos que se abstuvieron a votar ante la resolución de las Naciones Unidas.
Rusia y China hubieran podido vetar la resolución, pero prefirieron abstenerse. Los otros 10 miembros votaron a favor.