Se necesitan "varios meses" para controlar la radiactividad en Fukushima
Serán necesarios varios meses para frenar la radiactividad en la central nuclear de Fukushima, donde aparecieron dos trabajadores muertos este domingo y continúa la lucha para sellar la grieta del reactor 2 que vierte agua contaminada al mar , reconoció este domingo el gobierno japonés.
"Vamos a necesitar varios meses antes de que tengamos la situación bajo control”, afirmó el secretario del gabinete japonés, Yukio Edano, en una conferencia de prensa para informar sobre la situación en la planta nuclear.
A más de tres semanas del terremoto de 9 grados y el tsunami posterior que devastó grandes zonas del noreste de Japón, la prioridad es la fuga radiactiva que prevalece en la planta , el mayor accidente nuclear tras el de Chernóbil en 1986.
Edano dijo que se buscarán todos los medios para detener por completo el vertido radiactivo, aunque insistió en que serán necesarios varios meses, "si aplicamos métodos considerados como normales, creo que podríamos enfrentarnos a algo así".
"Hemos estado preguntando acerca de otras posibilidades para acortar ese periodo, pero no lo vemos factible", añadió el también portavoz del gobierno japonés, según un reporte de la agencia informativa japonesa Kyodo.
Explicó que las autoridades de la empresa Tokyo Electric Power Co. (TEPCO), operadora de la planta nuclear, examinan todas las posibilidades para reducir el plazo y poner fin a la crisis nuclear.
Para liberarse por completo de la contaminación radiactiva de la atmósfera, tierra y mar se necesitan varios meses, coincidió el Goshi Hosono, asesor especial del primer ministro Naoto Kan en un entrevista ofrecida con anterioridad a la cadena informativa Fuji TV.
"Aunque la planta aún no ha salido de su situación crítica, se ha recuperado cierta estabilidad, y es el momento para informar lo que estamos tratando de hacer con marcos de tiempo para ayudar a aliviar la ansiedad", dijo Hosono.
El asesor gubernamental admitió que la batalla para superar la crisis será larga, aunque aclaró que todo está bajo control y que en caso de cualquier riesgo se tomarán las medidas acertadas.
Como parte de estas acciones, Edano reveló que el gobierno va a aumentar su asistencia para las personas que fueron desalojadas de la zona de exclusión de 20 kilómetros alrededor de la planta nuclear y destacó que por ahora no es necesario ampliar la zona de seguridad.
El gobierno revisará si es necesario cambiar las áreas actualmente designadas, una vez que los expertos concluyan el análisis de las muestras radiactivas que toman en zonas en un radio de 30 kilómetros de distancia de la planta para descartar todo riesgo.
Agregó que las autoridades han analizado las funciones de la glándula tiroides de alrededor de 900 bebés y niños que viven en municipios cercanos a la planta, pero ninguno de ellos, afirmó, mostró signos de estar afectado por la radiación.