Ban Ki-moon le pide a Gbagbo que tome “la última oportunidad” para irse
Desafiante como siempre, Laurent Gbagbo permaneció este jueves atrincherado en el sótano de su residencia en Abidjan, al tiempo que desde las Naciones Unidas se le advirtió que debe de tomar la última oportunidad para una salida decorosa del poder.
Cerca de 200 hombres resguardan la residencia de Gbagbo en Abidjan, la ciudad más grande de Costa de Marfil, donde se respira un aire de tensión luego de una noche de fuertes combates entre los hombres de Gbagbo y fuerzas leales a su rival, Alassane Ouattara, reconocido por la comunidad internacional como el ganador legítimo de las elecciones de noviembre pasado.
“El presidente Gbagbo debe renunciar”, dijo el secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon desde Washington. “Tiene que ceder el poder. Ésta es su última oportunidad. Debe de tomar en cuenta la seguridad y prosperidad de su gente”.
Gbagbo, sin embargo, no mostró señal alguna de que se rendirá. No lejos de su residencia, atracadores saquearon la residencia del embajador de Japón, accediendo al techo de la casa, desde donde atacaron otras casas y diversas embajadas, incluidas la de Francia, según el coronel Thierry Burkhard, vocero del Ministerio de Defensa Francés.
En forma dramática, fuerzas francesas regresaron el fuego a los hombres de Gbagbo y rescataron a un conmocionado embajador japonés y a sus colaboradores, dijo Burkhard. La misión duró menos de una hora.
Los combates entre fuerzas de Gbagbo y Ouattara ocurren no solo a la luz del día. Ha pasado una semana desde que fuerzas leales a Ouattara entraron a Abidjan, donde el jueves realizaron un operativo al que llamaron el asalto final, que falló en capturar a Gbagbo.
“Pudimos escucharlos toda la noche”, dijo Kelnor Panglungtshang, un vocero del Comité Internacional de la Cruz Roja. “Hubo intercambio de disparos de armas pequeñas pero también lo que sonó a ataques con granadas viniendo desde la residencia. Es claro que el area está lejos de ser asegurada".
La televisión estatal dijo que Ouattara planea dirigirse a la nación a las 8 p.m. hora local. Los dos bandos han peleado por el control de la red de televisión que sirvió como una voz poderosa para Gbagbo.
Reporteros Sin Fronteras, una organización que defiende los derechos de los periodistas alrededor del mundo, dijo que tropas francesas atacaron el edificio esta semana.
“Ni un medio noticioso utilizado para fines de propaganda por una fuerza enemiga constituye un blanco militar legítimo”, afirmó el grupo. “Se encuentra protegido como cualquier otro edificio civil”.
Fuerzas leales a Ouattara atacaron la residencia de Gbagbo este miércoles , dijeron oficiales de ambos bandos. A pesar de los esfuerzos por lograr que Gbagbo se rindiera, éste permanece desafiante. Abdon Bayeto, un asesor de Gbagbo, dijo que él se encuentra en el sótano de su residencia “realizando actividades”.
Una pregunta clave sobre una rendición es a dónde podría ir Gbagbo si decide dejar Costa de Marfil. Un vocero de la Unión Africana dijo que varias naciones de dicha organización –sin nombrarlas – han ofrecido a Gbagbo “un refugio seguro”.
Las elecciones presidenciales de noviembre se esperaban que ayudaran a unir a la nación del oeste de África, tras salir de una guerra civil en 2002. Pero ocurrió lo contrario, dividiendo al país en dos.
La violencia postelectoral esporádica se convirtió en una guerra abierta luego de que tropas de Ouattara lanzaran una ofensiva que los llevó hasta Abidjan, el centro comercial de Costa de Marfil.
Cientos de personas han muerto en la violencia. Agencias humanitarias han advertido que la situación continúa empeorando.
Un avión fletado por la Cruz Roja aterrizó este martes en el norteño pueblo de Man, llevando cerca de 12 toneladas de suministros para quienes han sido afectados por la violencia.
“Las llamadas… no paran”, dijo Panglungtshang.
“Tenemos gente que ha llamado y nos dice sobre metralla aterrizando en sus casas o en las de sus vecinos”, dijo. “Ellos son civiles. Sabemos de gente que tiene diabetes y que no puede obtener su insulina y que se encuentran cerca de perder el conocimiento. Es desesperante, desesperante”.
Oxfam report que miles de personas han dejado Costa de Marfil para refugiarse en Liberia en las últimas 24 horas.
La agencia internacional, en cuyo sitio de Internet dice que su meta es eliminar la pobreza y la injusticia, afirmó que aparte de los combates en Abidjan, la violencia contra civiles también se ha reportaro en la parte oeste del país.
“La gente ha quedado atrapada en ataques, y están dejando sus casas sin nada a la mano”, dijo Shemeles Mekonnen de Oxfam, desde el sureste de Liberia. “Los refugiados hablan de combates, saqueos y casas incendiadas. Esta crisis se encuentra lejos de terminar, y las necesidades son inmensas”.
Joyce Joseph de CNN y la periodista Saskya Vandoorne contribuyeron con este reporte.