El recuerdo de Juan Pablo II 'conquista' a los habitantes de Roma
Aún faltan cinco días para que Juan Pablo II sea beatificado por el papa Benedicto XVI, pero el recuerdo de ese pontífice se ha apoderado de las calles de la Roma, donde los grandes monumentos y las ruinas comparten protagonismo con Karol Wojtyla.
Imágenes enormes que muestran al papa polaco oficiando misa y otras más humanas sosteniendo a un niño entre sus brazos pueblan desde hace unos días las estaciones de metro de la Ciudad Eterna, las paradas de autobuses e, incluso, las farolas de las calles más céntricas de Roma.
"Damose da fà. Semo romani (Pongámonos en marcha. Somos romanos)", es el mensaje que se puede leer en la mayor parte de los carteles.
Está escrito en el dialecto romano porque Juan Pablo II lo pronunció así, una frase que han querido recordar las autoridades de Roma para participar en un momento histórico y sin precedentes como éste, ya que en los últimos diez siglos de la Iglesia católica ningún Papa proclamó beato a su predecesor.
A medida que se acerca a la Ciudad del Vaticano, donde Juan Pablo II se convertirá en beato, su presencia se acentúa, ya que todas las tiendas de recuerdos de la zona han querido rendirle su particular homenaje con un sinfín de objetos diseñados para la ocasión.
Desde los tradicionales calendarios, las postales con su rostro y los bustos de porcelana, hasta las tazas de desayuno, los ceniceros, los platos y las camisetas estampadas con su imagen en todos los colores comparten escaparate con otros recuerdos más típicos de la Ciudad Eterna.
De las nuevas camisetas dedicadas a Juan Pablo II, la que más llama la atención de los que pasean por los alrededores de la Ciudad del Vaticano es la que imita la fórmula "I love New York", con un gran corazón rojo en medio.
La versión dedicada a Wojtyla mantiene ese vistoso elemento, incluye una imagen del pontífice oficiando misa y sustituye las palabras "Nueva York" por "Karol", el nombre de pila del papa polaco.
Aunque muchos de estos productos pueden adquirirse durante todo el año, los vendedores han querido convertirlos en objetos únicos, por lo que han grabado sobre ellos una inscripción conmemorativa de la beatificación del papa Wojtyla.
El contenido puede variar, pero en todos los mensajes aparece el nombre del futuro beato, Juan Pablo II, y la fecha en la que Benedicto XVI lo beatificará, el 1 de mayo de 2011.
De media, los precios de estos recuerdos oscilan entre los 50 céntimos de euro de las postales hasta los 20 euros que cuestan algunos de los bustos más grandes.
También con precios más elevados pueden encontrarse los libros -la mayoría ilustrados- sobre la vida del antiguo pontífice, que en los últimos días han disparado sus ventas.
La propietaria de la "Librería Española" de la céntrica Plaza Navona de Roma, Patricia Porpora, explica que desde hace unos diez días han aumentado las ventas de estos libros, que están escritos en español, por lo menos en un 15 %.
"Desde hace diez días hemos notado un incremento, por lo menos del 15 %, en las ventas de estos libros de Juan Pablo II, aunque según nuestras previsiones esperamos que la semana fuerte sea ésta, justo la previa a la beatificación", afirma.
No faltan tampoco los recuerdos con connotaciones especialmente religiosas, como los rosarios que, estampados con la imagen de Wojtyla, se han convertido en uno de los objetos más deseados de los últimos días.
Monedas, llaveros, cojines e imanes para el refrigerador completan la oferta de estas tiendas de recuerdos de Roma que, al igual que el sector hotelero de la ciudad, esperan hacer su agosto con esta celebración.