Un juez falla que agresor de Arizona no se encuentra apto para un juicio
Jared Lee Loughner, el acusado por el tiroteo de enero pasado en el que presuntamente intentó asesinar a la congresista estadounidense Gabrielle Giffords, no se encuentra apto para presentarse a juicio, según un fallo de un juez federal dado a conocer este miércoles.
El juez afirmó que tomó la decisión luego de una evaluación mental de Loughner.
“El acusado no pudo comprender los cargos”, falló el juez Larry Burns, luego de que se dio a conocer una evaluación de 52 páginas realizada por la psicóloga Christina Pietz, y otra de 43 páginas, elaborada por el psiquiatra Matthew Carroll.
Ambos concluyeron que Loughner no se encuentra apto para el juicio, debido a que no puede asistir en su defensa por un desorden mental.
Burns afirmó que concuerda con la evaluación de Carroll y dijo que Loughner se nota "claramente ilógico y confundido”. El juez también dijo que el acusado no está fingiendo una enfermedad y notó que ha actuado de forma extraña durante los últimos dos años.
El juez también aseguró que a Loughner no le gustó la idea de que fuera declarado enfermo mental. “Se burla de la idea”, afirmó Burns.
El acusado no tiene entendimiento racional, y tiene una “desconfianza irracional de sus abogados” e “ideas delirantes que le impiden defenderse legalmente”, afirmó el juez.
El fiscal tomará en custodia al acusado por un periodo que no excederá los cuatro meses, durante el cual Loughner será llevado a un hospital para que se le realicen más evaluaciones.
La próxima audiencia se celebrará el 21 de septiembre.
Durante una audiencia, Loughner fue escoltado afuera de la sala por alguaciles de la corte después de un momento explosivo, durante el cual un reportero le oyó decir: "Gracias por el espectáculo de monstruos. Murió justo en frente de mí", y "estás cambiando".
Luego de un receso, el juez de distrito Larry Burns pidió a Loughner que si quería ver un recordatorio de los procedimientos en un monitor de televisión, a lo cual el acusado accedió, por lo que fue removido de la sala.
El motivo de la audiencia fue para decidir si Loughner se encuentra competente para presentarse a juicio.
Loughner, de 22 años, y originario de Tucson, Arizona, enfrenta múltiples cargos, incluido el de asesinato e intento de asesinato, relacionados con el tiroteo del pasado 8 de enero en un estacionamiento de una tienda en Tucson.
El joven entró en la sala de la corte este miércoles sin la cabeza rapada ni afeitado, como se mostró en las fotografías de su ficha policial luego del tiroteo.
Loughner es acusado de matar a seis personas y herir a 13 más , incluida la congresista demócrata por Arizona, quien se encontraba en una reunión con simpatizantes al momento del tiroteo. Las autoridades han dicho que Giffords fue el blanco del ataque.
Loughner es acusado de matar a John M. Roll, un juez federal, a Gabriel M. Zimmerman, un integrante del equipo de Giffords, a Dorothy J. Morris, Phyllis C. Schneck, Dorwan C. Stoddard, y la niña de nueve años Christina Taylor Green.
Loughner se declaró inocente de los cargos.
Aunque recibió un tiro en la cabeza, Giffords se recupera de una cirugía que le implantó un hueso sintético y una derivación ventriculoperitoneal en el cráneo, informaron sus doctores la semana pasada.
Giffords atendió el lanzamiento del transbordador espacial Endeavour , que despegó la semana pasada con su esposo, el astronauta Mark Kelly, como comandante.
Entre los que atendieron la audiencia de este miércoles, se encuentra Susan Hileman, de 58 años, quien resultó herida durante el tiroteo, junto con su esposo Bill. Susan fue la vecina que llevó a la niña de 9 años, Christina, al evento de Giffords.
Cristina es recordada como la niña que murió en el tiroteo y que nació el 11 de septiembre de 2001.
Ted Rowlands reportó desde Tucson y Michael Martínez contribuyó desde Los Ángeles.