Trabajadores migratorios, de los más 'golpeados' por la guerra en Libia
Los trabajadores migrantes en Libia son uno de los sectores más afectados por la guerra civil que vive ese país desde febrero pasado , afirmó Niurka Piñeiro, representante de la Organización Internacional para la Migración (OIM)
En entrevista con Carlos Montero en Café CNN, Piñeiro dijo la emergencia en Libia afecta a millones de personas, porque no sólo los impacta a ellos sino también a sus familias que dependen de las remesas que les enviaban.
"Es una tragedia de una magnitud enorme, porque en Libia se estimaba que había 2.5 millones de migrantes", dijo. "Entonces si cada uno tiene una familia de entre cuatro y seis o siete personas, pues ahí ya tenemos el número de personas impactadas por esta crisis".
La representante de la OIM, grupo con más de 60 años de presencia en 132 países y colaborador de la Organización de las Naciones Unidas, dijo que la mayoría de los migrantes en Libia huyó hacia sitios cercanos en Túnez, Egipto, Chad y Niger.
Más de medio millón lo hicieron a Túnez , afirmó, y hoy en día siguen cruzando, "todos los días siguen cruzando aunque los números sean más bajos".
La gran tragedia en este caso, afirmó, es que la mayoría de ellos dice que no han recibido sus salarios los últimos meses, y se entiende, porque los empleadores a lo mejor no tienen acceso al banco o se han ido a otras ciudades.
"Es una tragedia sin precedente y no la vemos, porque estamos concentrados en los bombardeos", insistió. "Es una tragedia que tiene muchas ramificaciones".
Piñeiro dijo que ello se traduce en que la razón por la cual fueron a Libia, trabajar y ganar dinero, se ha perdido. Los migrantes "han tenido que abandonar Libia como llegaron: sin nada".
La migración un tema multilateral
La representante de la OIM dijo que hoy en día el tema de mayor relevancia es la migración, porque impacta al mundo en general y a todos los ámbitos, económicos, políticos y diplomáticos, por ejemplo.
De ahí que, opinó, la migración no debe manejarse sólo como una iniciativa , sino enfocarla a trabajar ayudando a los países en desarrollo para que puedan tener más empleo y las personas no se vean obligadas a salir de su territorio.
Lo importante, sostuvo, es que no debe trabajarse en forma unilateral, sino que todos los países deben unir esfuerzos, conjuntarlos, para encontrar las soluciones al tema migratorio.
Dijo que el fenómeno continuará mientras en Estados Unidos y en Europa haya trabajo pagado bajo, el mínimo o por debajo del mínimo, y haya empleadores que estén dispuestos a contratar inmigrantes ilegales.
Es oferta y demanda, añadió, es la economía.
"En los países ricos cada vez envejecemos más, estudiamos más y no queremos hacer esos trabajos", puntualizó.