Sudán reconoce oficialmente la soberanía del país más joven del mundo
Sudán reconoció oficialmente este viernes la soberanía de Sudán del Sur, que después de la medianoche concretará su escisión para convertirse en el país más joven del mundo .
"La República del Sudán anuncia su reconocimiento a la creación de la República de Sudán del Sur como un Estado soberano dentro de los límites de 1956", anunció Bakri Hassan Salih, ministro de la Presidencia.
La referencia a los límites de 1956, sin embargo, causó polémica debido a que coloca en el norte a la disputada región de Abyei.
La región, del tamaño de Connecticut, no sólo es el hogar de la gente Ngok Dinka, que está estrechamente relacionada con el Sur, sino que también sirve como tierra de pastoreo para las tribus Misseriya del norte.
En las últimas semanas los combates han estallado otra vez en Abyei, lo que desató temores de una nueva guerra que estropearía los preparativos para celebrar la independencia de sur de Sudán, que se realizan esta ciudad, que será la capital de la nueva nación.
El Consejo de Seguridad votó unánimemente para enviar hasta 7,000 efectivos y 900 policías uniformados al nuevo país.
El mandato de la anterior misión de la ONU acaba este sábado con la independencia de Sur de Sudán, y las fuerzas de paz serán parte de una nueva operación del organismo mundial.
El Consejo de Seguridad tiene previsto reunirse de nuevo el 13 de julio para discutir sobre la afiliación de la nueva nación a la ONU.
En Yuba, este viernes el ambiente era de júbilo, pese al derramamiento de sangre en Abyei y en Kordofan Sur, que es una zona rica en petróleo . Ambas se localizan en el norte, pero la mayoría de sus habitantes están aliados con el Sur.
El camino que conduce a la Plaza de Armas de Yuba, donde las banderas ondean a media asta, fue acondicionado para la realización de un desfile conmemorativo.
Sólo se permitió el tránsito a pie el perímetro que rodea al sitio de la celebración. Los automóviles fueron retirados por soldados que portaban gafas de sol.
El aeropuerto fue cerrado a los vuelos comerciales para permitir la llegada de los dignatarios que se espera que el sábado sean testigos del nacimiento de esta nueva nación.
Hace seis meses, en enero, la población de Sudán votó abrumadoramente por la independencia de Sudán del Sur. El referéndum sobre la escisión era parte de un acuerdo de paz de 2005 que buscaba poner fin a décadas de violencia entre las dos partes.
Al parecer, los dos países van a divorciarse sólo de nombre. Aún no hay acuerdos sobre las fronteras, el petróleo o incluso el estado de sus respectivos ciudadanos.
Pero el presidente sudanés, Omar al-Bashir, todavía espera que el sábado haya un gesto de pragmatismo, y desde su oficina hacen llamados de esperanza por las relaciones fraternales.
El Sur, a su vez, está respondiendo con la misma gracia, reservando para él una entrada separada de otros dignatarios, cuando el himno de la República de Sudán suene por última vez en la nueva tierra soberana.