EU de 'duelo': lo que debe hacerse con una nación deprimida
Como diría el musical de Broadway Anything Goes, “siempre está más oscuro justo antes de que se prendan las luces”.
Encuestas recientes confirman que el país está buscando desesperadamente esas luces en medio del malestar económico. Sin embargo, no es fácil encontrar señales positivas.
La evidencia: una tasa de desempleo arriba del 9%, la degradación de la calificación de Estados Unidos ante Standard & Poors , bajas de tropas estadounidenses en Afganistán , déficits gubernamentales en aumento, una creciente deuda nacional, el dólar recibiendo una golpiza en el extranjero, precios de gas muy volátiles y un atasco en Washington que tiene todo virtualmente detenido.
Al parecer, Estados Unidos está atorado .
“Ya que la Casa Blanca y los miembros del Congreso no pudieron entenderse, Estados Unidos es degradado”, dijo Juneous Pettijohn, un iReportero de CNN. “¡Que esto sirva de lección! Dejen a un lado sus EGOS y únanse para sacarnos de este desastre financiero”. Ciertamente no ayuda a la psique del país cuando los economistas predicen que Estados Unidos vivirá una doble recesión. La Federación parece haberse rendido al decirle a los bancos que pretende mantener las tasas de interés cercanas a cero durante los próximos dos años.
Y Wall Street nos recuerda todos los días que los inversionistas están ansiosos. El lunes, Dow Jones cerró más de 600 puntos. El martes, recuperó la mayoría, 430 puntos. El miércoles, cerró con una caída de más de 500 puntos.
“El Dow sube, el Dow baja… Es realmente una profecía que se cumple por su propia naturaleza y entre más agobiados estamos, somos menos propensos a tomar riesgos, eso es ser pesimista, ¿no?”, preguntó el iReportero WJ O'Reilly.
Es difícil encontrar una mayoría de voces estadounidenses –además de las del presidente Obama y algunos republicanos optimistas– que aún piensen que nuestros mejores días están por venir.
“Yo creo que el país está deprimido… El estado de ánimo del electorado es de depresión”, dijo Jennifer Danohue, catedrática de política del Instituto Eisenhower del Colegio Gettysburg. “Pienso que hay duelo en Estados Unidos cuando nada cambiará el hecho de que los estadounidenses acepten que su estilo de vida fundamental ha cambiado, que lo ha hecho por el previsible futuro”.
¿Se prenderán pronto las luces?
“Yo no lo veo como un tipo de oscuridad antes del final de la tormenta”, dijo Donahue. “Pienso que los votantes están preparándose para resistir y que la gente está observando con atención… Los votantes tienen miedo”.
Obama ha tratado de calmar los miedos que han dominado los hogares del país.
“No importa lo que diga una agencia, siempre seremos un país AAA”, dijo este lunes en la Casa Blanca. “Para todos los retos que enfrentamos, seguimos teniendo las mejores universidades, algunos de los trabajadores más productivos, las compañías más innovadoras y los emprendedores más audaces de la Tierra”.
El presidente se remitió a la historia, destacando que los estadounidenses siempre han salido delante de crisis económicas.
“Los estadounidenses han pasado por mucho en los últimos años, enfrentándose a la peor recesión, la crisis financiera más grande desde los años treinta y lo han hecho dignamente”, agregó. “Están trabajando muy duro para criar a sus familias y todo lo que piden es que trabajemos igual de duro aquí en esta ciudad, para facilitar sus vidas. Eso no es mucho pedir”.
¿Hay algo que Obama pueda hacer para cambiar las cosas?
Donahue sugirió que le diga al país que pueden pasar años antes de que nos recuperemos y celebremos la más mínima señal de que la economía y el país están mejorando.
De cualquier manera, muchos observadores dicen que todo se reducirá a empleos, empleos y más empleos. “Creo que será difícil tranquilizar a los votantes, especialmente a aquellos que están desempleados, con que una pequeña reducción de las tasas de desempleo harán la diferencia. Tendrían que bajar de manera significativa”, comentó Donahue. “Pienso que es muy difícil para la Casa Blanca salir ahora con un mensaje que sea esperanzador y preciso a la vez. Es muy poco lo que Obama puede decir que en verdad haga que la gente esté menos preocupada por lo que está ocurriendo con el mercado”.
En encuestas recientes, los estadounidenses dicen que no están convencidos de que eso ocurra en el corto plazo.
Una encuesta de CNN y ORC International publicada este lunes, reveló que el 60% de los encuestados afirman que la economía sigue en crisis y empeorando. Esto representa un incremento de 24 puntos desde abril, cuando la mayoría creía que las cosas se habían estabilizado.
“Debido a que la pregunta se hizo en primavera de 2009, el número de estadounidenses que dijeron que la economía estaba en crisis nunca estuvo por arriba del 40%”, comentó el director de Encuestas de CNN, Keating Holland. “El alza en el pesimismo económico es generalizado: la mayoría de cada gran subgrupo demográfico y político cree que la economía está en crisis y empeorando”.
Tres de cada cuatro personas que se encuestaron en esta ocasión afirman que las cosas se pondrán difíciles para el país, un incremento del 15% desde mayo. Sólo el 24% piensa que las cosas estarán bien, el porcentaje más bajo desde abril de 2009.
Comparen esto con octubre de 1987, cuando el mercado de valores tuvo su peor pérdida de la historia en un solo día como lo indicaron el declive porcentual. Holland dijo que sólo el 4% de los votantes encuestados en ese entonces consideró que fue “afectado en gran medida y sólo el 23% consideró que tuvo una afectación menor”.
La crisis del mercado de valores ocurrió bajo el mandato del presidente Reagan, un republicano a quienes muchos le atribuyeron la salvación de la economía. Y recuerden que con Reagan, los impuestos se elevaron, al igual que la deuda del país.
Tampoco afectó que el Congreso no discutiera tanto como lo hace ahora, agregó Donahue. “Creo que la gente tenía más fe en las instituciones gubernamentales durante la era de Reagan. Se pensaba en mayor medida que se podía confiar en el gobierno”.
Quizá se deba al conservadurismo fiscal de Reagan y su famosa declaración: “El gobierno no es la solución a nuestro problema; el gobierno es el problema”. Los demócratas también estaban dispuestos a defender las políticas de Reagan respecto a la Unión Soviética y su plan de elevar los impuestos.
Y también teníamos la icónica campaña de Reagan “Sale el sol nuevamente en Estados Unidos”, con la cual buscó tranquilizar y convencer a la ciudadanía de que la economía estaba recuperada.
El promocional –parte de su campaña presidencial de 1984, mostraba imágenes de estadounidenses trabajando duro. “Hoy, más hombres y mujeres irán a trabajar como nunca en la historia del país”, declaraba Hal Riney, la voz amistosa del promocional. “Ha salido el sol nuevamente en Estados Unidos y bajo el liderazgo del presidente Reagan, nuestra nación está más orgullosa, fuerte y mejor. ¿Por qué regresaríamos a donde estábamos hace menos de cuatro años?”
Y esa pregunta será usada sin lugar a dudas en la campaña presidencial de los adversarios de Obama para el 2012.
Los ataques han comenzado. El precandidato presidencial republicano Mitt Romney está arremetiendo contra el presidente por su manejo de la economía.
“No creo haber visto en mi vida una presidencia más partidista y orientada a repartir culpas”, dijo este lunes Romney a miembros de la Cámara de Comercio de Concord, New Hampshire. “Basta de atacar, hay que asumir la responsabilidad y liderar”.
Palin, quien es mencionada como una potencial contendiente, dijo: “Sean precavidos con los esfuerzos del presidente Obama para arreglar el problema de la deuda. Entre más trata de arreglar cosas, más las descompone”.
Romney, ex gobernador de Massachusetts y aspirante presidencial en el 2008, agregó que el presidente es la persona que dirige a la nación y dirige los esfuerzos en Washington. “Y si es complicado trabajar ahí, bienvenido al mundo real”.
Pero Obama aún se aferra a su mensaje de esperanza de su campaña.
“La razón por la que soy tan optimista sobre nuestro futuro, la razón por la que tengo fe en los Estados Unidos de América, es por el pueblo estadounidense”, afirmó. “Es por su perseverancia, coraje y voluntad para compartir las cargas que enfrentamos juntos, como una nación”.