Una beca cambia la vida de un migrante mexicano originario de Zacatecas
Hace dos meses, el migrante Octavio Viramontes, un mexicano de 18 años residente en California, recibió una noticia que cambió su vida: obtuvo una beca de 100,000 dólares para estudiar en la Universidad de Harvard .
Sin ese apoyo, otorgado por la empresa de generación de energía Proton Energy Systems, habría sido imposible costear sus estudios en la prestigiosa institución, pues su familia, dedicada al trabajo en el campo, carece de los recursos suficientes para financiar su carrera universitaria.
"Mis papás trabajaban en el field (campo) cosechando uvas, no iban a poder pagar una universidad, una colegiatura como la de Harvard, yo lo sabía. Lo que hice fue ir a internet uno o dos años antes, buscaba becas, y a veces, cuando encontraba una que iba a poder solicitar, la ponía en un Word document (archivo de texto) y la guardaba", relató Viramontes en entrevista.
Omar, uno de sus tres hermanos, había concursado fallidamente por la beca de Proton Energy y este año le recomendó postularse. El programa fue creado en 2010 para apoyar a estudiantes que "demuestren un desempeño sobresaliente, excelencia y ser una promesa en el campo de la ciencia o la tecnología", de acuerdo con la página web de la compañía .
"Ya tenía una o dos recomendaciones, empecé a trabajar, a hacer mi ensayo, vi que tenía que hacer este esfuerzo y lo mandé. La verdad se me había olvidado… Me dijeron que la había ganado como dos meses después", contó Viramontes vía telefónica desde Delano, una localidad del centro de California.
Desde que supo la noticia, ha tenido poco tiempo para descansar.
Convertirse en uno de los pocos hispanos que entrarán a Harvard en 2011 —261 de un total de 2,158 nuevos alumnos, según la Harvard Gazette —, y además, poder hacerlo con una beca completa, lo llevó a ser invitado a Seattle y a Miami, donde participó en un programa de televisión, así como a un internado de verano en la universidad de Stanford. Esta semana acudirá a Harvard, en el estado de Massachusetts, para saber qué clases podrá cursar.
A sus 18 años, dice aún no haber decidido qué carrera estudiará, pero cree que se inclinará por medicina. Se imagina como un médico en contacto con los pacientes más que haciendo investigación.
"A mí me hace más feliz ayudar a las personas directamente… Si hago research (investigación), también le voy a poder ayudar a otras personas, pero puede tomar años, mucho tiempo. Yo creo que voy a ser un doctor", dijo.
De Zacatecas a California
Viramontes es uno de los casi 13 millones de mexicanos que residen en Estados Unidos, de los cuales poco más de la mitad llegaron al país de forma legal.
Cuando tenía nueve años, su padre logró tramitar los documentos para que la familia migrara legalmente de Jalpa, en el norteño estado de Zacatecas, a California, en el suroeste de Estados Unidos. Permanecieron ahí dos años, volvieron a México y, finalmente, decidieron dejar la nación de manera definitiva.
"Mi papá tenía un ranchito en México y lo vendió, y yo sabía que no íbamos a volver", recordó.
Los casi 10 años que ha pasado en Estados Unidos han sido "una batalla" para conseguir adaptarse a la cultura del país, en especial al idioma, lo que ha implicado "hacer mucho más, mucho esfuerzo".
"En secundaria no era el estudiante número uno, estaba en los altos pero no era el número uno. Pero cuando llegué a la preparatoria, aquí en la high school, vi que podía, si trabajaba y le ponía mucho esfuerzo, ser uno de los mejores estudiantes de mi escuela, de mi grado", dijo.
A comienzos de 2011, el Consejo Nacional de La Raza, una de las organizaciones hispanas más grandes de Estados Unidos, reconoció a Viramontes como joven líder hispano por su trabajo comunitario. Él explicó que una de sus actividades ha sido trabajar con un profesor para ayudar a otros estudiantes a aprender matemáticas.
"El significado de la educación"
La comunidad de migrantes en el lugar donde vive está conformada por dos grupos: los mexicanos, que representan alrededor del 80%, y los asiáticos, que son el 20% restante.
"La comunidad mexicana está bien, pero se necesita más. La primera cosa por la que vinieron aquí mis papás fue porque querían una mejor vida, más dinero, pero de eso salió que podían dar una mejor educación a sus hijos, y eso me dieron. A veces los padres se dan cuenta de que pueden tener una mejor vida, pero no de cuál es el significado de la educación", dijo.
Su hermano Omar, por ejemplo, no se rindió cuando supo que no consiguió la beca de Proton Energy. En cambio, buscó otras oportunidades y consiguió la beca de la Fundación Bill y Melinda Gates, con la que pagará sus clases en la Universidad de San Diego.
Pero mientras ambos se preparan para continuar con sus estudios, miles de jóvenes indocumentados se manifiestan en sus localidades y en las redes sociales por la aprobación en el Congreso del DREAM Act , una iniciativa que plantea abrir un camino a la ciudadanía estadounidense a los estudiantes que cumplan ciertos requisitos, como haber terminado la preparatoria, saber inglés y no tener antecedentes penales.
"Yo digo que tenemos que empezar, el presidente (Barack Obama) y nuestros representantes, a tan siquiera pasar el DREAM Act, a darle una oportunidad a estudiantes . Conozco gente que quería estudiar y no pudo hacerlo por falta de papeles y se fue al field. Ellos pudieron haber dado mucho a este país", dijo Viramontes.
También se declara partidario de una reforma migratoria que regularice el estatus de millones de indocumentados, pero considera que ese proceso debe ir acompañado de otros cambios.
"Muchos migrantes latinoamericanos vienen acá a Estados Unidos porque no pueden encontrar una mejor vida allá en México, en Guatemala, en El Salvador, y Estados Unidos se tiene que dar cuenta de que tiene que hacer esta reforma, pero también ayudar a estos países para que su economía se eleve", dijo.
"Una de las cosas que quiero hacer cuando esté en la universidad es entrar al programa de Médicos Sin Fronteras para ver de qué forma puedo ayudar a México", agregó. "Al último, voy a poder apoyar mucho más a comunidades en México si me quedo acá y de aquí empiezo a darle oportunidades a otras personas allá".