El primer ministro británico se preocupa por la niñera de los Gadhafi
El primer ministro británico, David Cameron, elogió el papel de la CNN al llamar la atención sobre la difícil situación de una ciudadana etíope que laboró para la familia de Moammar Gadhafi y que, según su versión, sufrió heridas horribles a manos de la nuera del líder libio fugitivo.
La historia de Shweyga Mullah ha tocado los corazones de muchas personas alrededor del mundo.
Las donaciones a través de una página de recaudación de fondos establecida por Anti-Slavery International, en colaboración con CNN, para reunir dinero para el tratamiento y la atención de Mullah ya superaron los 12,000 dólares (unos 147,840 pesos).
"Creo que CNN ha hecho un muy buen trabajo para elevar el perfil de este trágico caso, y creo que lo que importa es que esta persona reciba la atención médica que necesitan", dijo Cameron a Matthew Chance, corresponsal de CNN Internacional.
"Dónde se lleve a cabo queda en segundo término, lo más importante ahora es conseguir ayuda médica".
Mullah dijo a CNN que Aline Gadhafi, la esposa de Hannibal, el hijo del líder libio, vertió agua hirviendo sobre ella después de perder los estribos cuando su hija no dejaba de llorar y la niñera se negó a golpear a la niña.
El ataque dejó el rostro de Mullah como un mosaico grotesco de heridas y costras de color rojo. Su pecho, el torso y las piernas muestran cicatrices, algunas antiguas pero otras todavía están en carne viva.
Cuando Mullah habló con CNN en su lecho de un hospital de Trípoli a principios de esta semana, líquido claro brotaba de una herida abierta en la cabeza.
"Me llevó a un cuarto de baño. Ella me ató las manos a la espalda, y me ató los pies. Ella selló con cinta mi boca, y empezó a verter el agua hirviendo en la cabeza así", dijo Mullah, imitando con sus brazos la vasija sobre su cabeza.
El ministro de Salud del gobierno rebelde, Dr. Naji Barakat, tiene previsto visitarla la tarde de este jueves, dijo a Dan Rivers, periodista de CNN en Trípoli.
Matthew Chance, Jonathan Wald y Dan Rivers, periodistas de CNN, colaboraron a este reporte.