Guatemala exige responsabilidad de países consumidores en lucha antinarco
Ante la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el gobierno de Guatemala exigió que los países consumidores de drogas sean corresponsables en el combate a los cárteles del narcotráfico y de la violencia que generan en el continente.
“(México y Centroamérica) no podemos seguir poniendo la sangre y recibiendo las balas”, dijo el presidente guatemalteco, Álvaro Colom, en su discurso en la sede de la ONU, en Nueva York.
“Necesitamos que se controle el consumo, que los países acepten su responsabilidad por los asesinatos que se cometen en nuestro territorio”, agregó el mandatario.
Guatemala, un país centroamericano de 14.7 millones de habitantes, enfrenta la expansión de grupos del crimen organizado como Los Zetas, cuya presencia ha derivado en varias muertes y en que las autoridades declararan estado de sitio en dos departamentos, Alta Verapaz y Petén.
Colom, quien concluye su mandato en enero de 2012, afirmó que en su gobierno se vivió “una espeluznante escalada de violencia” y que “se recuperaron territorios enteros en control del narcotráfico”.
El mandatario guatemalteco secundó el llamado de su homólogo mexicano, Felipe Calderón, para que las naciones consumidoras, en especial Estados Unidos, se sumen al combate a los cárteles del narcotráfico .
“México está haciendo su parte: está combatiendo al crimen con energía, pero es necesario que países consumidores de droga realicen acciones efectivas para disminuir radicalmente su demanda”, dijo Calderón este miércoles en su discurso ante la ONU.
Los gobiernos de México y Centroamérica exigen que esas naciones establezcan controles más sólidos que frenen el tráfico de armas y dinero en efectivo, así como el lavado de dinero, a fin de debilitar a los grupos delictivos.
A finales de junio, Guatemala fue sede de una cumbre regional en la que varios gobiernos, como el de El Salvador y Costa Rica, pidieron que se adopte una estrategia continental anticrimen.
Varios analistas y funcionarios consideran que la presión que se ejerce contra los criminales en Norte y Sudamérica ha llevado a esas organizaciones a buscar nuevas rutas, principalmente en Centroamérica, lo que ha aumentado la violencia en la zona.
México inició una ofensiva frontal contra el crimen en diciembre de 2006, al inicio del mandato de Calderón. Entre esa fecha y enero de este año, en su territorio se han registrado 34,600 asesinatos vinculados con la actividad de la delincuencia.