La oposición siria busca unificarse y crea un Consejo Nacional
Una nueva alineación de los grupos de oposición sirios, el Consejo Nacional Sirio, dio a conocer el domingo que este “representará la revolución siria” dentro y fuera del país en un esfuerzo por ponerle fin al gobierno del presidente de Siria, Bashar al-Assad.
"Al responder a los llamados de los jóvenes de la revolución, el Consejo Nacional pide a los cuerpos y organizaciones internacionales responsabilizarse y trabajar para proteger al pueblo sirio de la guerra que se les ha declarado", dijo el grupo en una declaración leída en árabe, en un encuentro de la oposición en Estambul.
"Las fuerzas que suscriben este documento declaran el establecimiento del Consejo Nacional Sirio como marco para la unidad de la oposición y la revolución pacífica", dijo el grupo en su texto, leído por Burhan Ghalioun, activista y personaje destacado de la oposición.
El consejo "trabajará para movilizar a todos los grupos del pueblo sirio y otorgar toda clase de apoyo necesario para promover la revolución y alcanzar las metas de nuestra gente, entre las cuales están el derrocar al actual régimen, incluyendo a la cabeza del régimen, y construir un sistema democrático y multipartidista en un estado civil que brinde igualdad a todos sus ciudadanos, sin ninguna clase de discriminación".
Los Comités de Coordinación Local, los cuales organizan y documentan protestas en contra del régimen sirio, dijeron que grupos, incluidos los Hermanos Musulmanes de Siria, Las Fuerzas de la Revolución, el Consejo Público para las Fuerzas de la Revolución y el Consejo Superior de la Revolución se han unido todos al gobierno de oposición.
La idea se retoma del éxito del Consejo Nacional de Transición en Libia.
"Este es el organismo que se verá como el núcleo de un gobierno en el periodo de transición", comentó Yaser Tabbara, un abogado sirio-estadounidense que participó en la reunión de este domingo. Tabbara precisó que el consejo incluirá una "comisión presidencial" con 29 miembros y un comité ejecutivo de siete personas.
Distintos grupos políticos exiliados anunciaron la creación de otros "consejos nacionales" en meses recientes. Cada grupo reclama la representación de la revolución Siria, que surgió en la frontera sur, en la ciudad de Daraa, en febrero pasado. Hay signos de que la oposición dentro y fuera de Siria, escindida por años, ha estado luchando por la cohesión.
Los ánimos se calentaron cuando a activistas se les negó la entrada al salón de conferencias donde se llevó a cabo la reunión.
"Nos invitaron al principio para unificar a la oposición", comentó Faraj al Faraj, un líder tribal del centro del país que vive en el exilio, en Arabia Saudita. "Pero cuando quisimos entrar al salón dijeron que estaba prohibido, 'no pueden pasar. Necesitan una credencial...'; después gritaron y llamaron a la policía. Y la policía me arrestó y me sacó".
Faraj comentó que la policía turca lo liberó, eventualmente.
Este domingo por la tarde, los participantes trataban de resolver los argumentos que llevaron a sacar a los simpatizantes de Faraj.
"Era un asunto de logística que desembocó en pérdida de control de la situación, por lo que fue frenado", dijo Tabbara.
La declaración leída por Ghalioun decía que el consejo se formaba "en respuesta a la demanda del pueblo sirio y después de los amplios esfuerzos para unir a las fuerzas de la oposición con la heroica lucha de la gente de siria, que enfrenta la guerra y masacres a diario".