Irán, dispuesto a revisar la evidencia del complot saudita, dice ministro
Irán está dispuesto a revisar la evidencia sobre un hombre iraní que conspiraba para asesinar al embajador de Arabia Saudita en Estados Unidos, declaró el Ministro de Relaciones Exteriores de este país el lunes, a pesar de que negó que las acusaciones tuvieran las “bases necesarias de hecho” para hacerlo.
“Estamos preparados para considerar cualquier problema con paciencia, aunque sea falso de origen. Hemos pedido a Estados Unidos que nos proporcione la información relevante sobre este asunto”, afirmó el ministro de Relaciones Exteriores, Ali Akbar Salehi, a la Agencia de Noticias de la República Islámica.
El Departamento de Estado de Estados Unidos sostuvo, la semana pasada, que han estado en contacto directo con Irán sobre la acusación de complot, pero un funcionario iraní lo negó.
Dos funcionarios del Departamento de Estado dijeron que la embajadora de Estados Unidos en las Naciones Unidas, Susan Rice, se reunió con Mohammad Khazaee, representante permanente de Irán en el organismo. Sin embargo, la misión diplomática iraní en Nueva York lo negó.
“No hubo ningún tipo de negociación entre los dos países y no hubo tal contacto”, sostuvo Alireza Miryousefi, secretaria de prensa de la Misión Diplomática Iraní de las Naciones Unidas.
El ministro de Relaciones Exteriores, Salehi, declaró este lunes que las acusaciones del complot tenían como propósito crear discordia entre los Estados de la región. Asimismo afirmó que Irán nunca ha estado involucrado en operaciones terroristas, publicó la Agencia de Noticias de la República Islámica.
La aparente voluntad de Salehi de ver la evidencia del complot, contrasta con la respuesta del líder supremo del país de este sábado. Ayatollah Ali Khamenei calificó las acusaciones de “insignificantes y absurdas” en su primera reacción a la acusación de complot.
“Ellos (Estados Unidos) quieren aislar a Irán”, dijo Khamenei ante gritos que clamaban “Abajo América” en un discurso ante miles de personas en la ciudad iraní de Gilangharb.
Las autoridades estadounidenses acusaron a Irán de estar involucrado en un complot para asesinar al embajador saudí en Estados Unidos Adel Al-Jubeir, en la primavera del 2012.
El presunto plan incluía una conexión con las fuerzas Quds, una rama de la Guardia Islámica Revolucionaria, que formalmente se reporta con Khamenei.
Manssor Arbabsiar, naturalizado estadounidense de 56 años , y Gholam Shakuri un miembro iraní de base de la Guardia Revolucionaria Islámica, fueron acusados de conspirar escondiendo sicarios de un cartel de droga mexicano para colocar una bomba en un restaurante, en donde el embajador estaría.
Las autoridades desarrollaron el caso contra los sospechosos con ayuda de informantes encubiertos como socios del cártel mexicano de drogas, de acuerdo con oficiales y declaraciones de agentes del FBI.
Reza Aslan, experto en religión y escritor, dijo a CNN el sábado que el complot descrito “no corresponde con el modus operandi de las Fuerzas Quds”
"Usar un cártel de droga sería arriesgado y un agente de las fuerzas Quds sería más confiable que un vendedor de carros usados en Texas, afirmó.
“Es atípico y descuidado”, dijo Aslan. “Realmente no sirve al interés iraní en ninguna forma legítima”.
Irán podría más fácilmente tener como blanco a diplomáticos sauditas en Medio Oriente, África y en cualquier lugar, dijo Aslan, “hacerlo en suelo estadounidense es sin duda un ataque a Estados Unidos, no a Arabia Saudita”.