Siria acepta el plan de 500 observadores de la Liga Árabe
Siria aceptó en “un principio” un plan de la Liga Árabe para permitir que 500 observadores verifiquen si el régimen está tomando las medidas necesarias para proteger a los civiles, dijo este viernes un diplomático árabe de alto rango.
Siria solicitó modificaciones de los protocolos antes de firmar el acuerdo, dijo el diplomático, que tiene conocimiento de las negociaciones entra la Liga Árabe y Siria.
Las naciones árabes habían votado a favor para suspender a Siria del grupo. Pero la Liga, que se reunió el miércoles en Rabat, en Marruecos, dio a Damasco tres días para poner en práctica un protocolo que permita a los observadores entrar en el país.
Nabil el-Araby, el secretario general de la Liga Árabe, indicó que estudian una carta del ministro de Exteriores sirio, Walid al-Moallem, que incluyó modificaciones en el protocolo y las obligaciones de los observadores.
Éste es el último esfuerzo diplomático para resolver la crisis en Siria. La presión internacional ha ido en aumento hacia el presidente Bashar al-Assad por la represión sangrienta de su régimen contra los manifestantes que buscan la democracia en su país, en medio de las preocupaciones de que la violencia en Siria es cada vez mayor.
Pero el apoyo de otras naciones y la confianza en el régimen han disminuido. El jefe de la diplomacia de Francia, Alain Juppe, dijo este viernes que las cosas en la asesinada Siria “ya no son sostenibles”, y busca que el Consejo de Seguridad de la ONU de un paso adelante y luche contra la crisis en estos ocho meses de protestas en la nación árabe.
“A pesar de todas las llamadas que se han hecho al régimen”, no se han llevado a cabo las iniciativas de paz para poner fin a la violencia en las calles, dijo Juppe en la capital turca Ankara. “En el norte de Siria, varios pueblos fueron bombardeados por el Ejército sirio” este viernes, agregó.
Un grupo activista de Siria dijo que al menos 19 personas murieron el viernes por las fuerzas de seguridad y el Ejército, entre ellos cuatro niños. Ocho personas murieron en la región meridional de Daraa, donde unas 20 personas también resultaron heridas por las fuerzas de seguridad. En Hama murieron cinco personas, en los suburbios de Damasco cuatro y dos en Homs, indicaron los Comités de Coordinación Local.
Más de 3,500 personas han muerto y miles han sido encarcelados en ciudades de todo el país, según estimaciones de la ONU. Funcionarios de Francia y Turquía han criticado la conducta del régimen sirio, y algunos diplomáticos internacionales clave, como el ministro de Exteriores ruso, Sergey Lavrov, dijo el jueves que los continuos ataques a edificios del gobierno en Siria “parece una guerra civil”.
En las últimas semanas, un grupo de desertores llamado Ejército Libre Sirio lanzó ataques contra objetivos del gobierno. Y este viernes otro grupo de desertores denominado Los Halcones de Damasco anunciaron su formación en un video. “Nos comprometemos a luchar contra el gobierno injusto de Bashar al-Assad y esperamos que nos devuelva la libertad y la dignidad de nuestro pueblo”, dijo el grupo en la grabación.
La secretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton, dijo el viernes en Bali, Indonesia, que Estados Unidos estaba preocupado desde hace semanas por la violencia que va en una espiral sin control.
El fracaso de Siria para llevar a cabo las reformas prometidas ha llevado a una oposición bien armada y preparada para tomar medidas contra el gobierno sirio, indicó.
Ahora los actores regionales más importantes de las naciones de la Liga Árabe y Turquía “están enviando el mismo mensaje: que el gobierno sirio tiene que cambiar y tiene que cambiar ahora, o todos sabremos cuáles serán las consecuencias”, afirmó.
CNN no ha podido verificar de forma independiente los combates y las muertes debido a que el gobierno sirio ha restringido el acceso a los medios de comunicación internacionales.
Laura Smith-Spark, Joe Sterling, Mohamed Fadel Fahmy, Rima Maktabi, Niki Cook, Sarah Jones y Stephanie Halasz contribuyeron a este reporte.