El partido del presidente Sarkozy niega un complot contra Strauss-Kahn
Una figura destacada del partido del presidente francés, Nicolas Sarkozy, el UMP, negó las teorías que apuntan a que los cargos por los que el exdirector del Fondo Monetario Internacional (FMI), Dominique Strauss-Kahn, fue arrestado en mayo por abuso sexual fueran fruto de un complot.
“Imaginar que lo que le hubiera ocurrido el señor Strauss-Kahn era objetivo de algún tipo de complicidad en el UPM, es difícil de creer”, dijo Jean-Francois Cope, secretario general del partido.
Los cargos contra Strauss-Kahn fueron retirados en agosto tras las crecientes dudas sobre la credibilidad de su acusadora, la camarera de hotel Nafissatou Diallo. Sin embargo, el escándalo terminó con su carrera en el FMI y con cualquier esperanza de que lidere la oposición socialista, que amenaza el triunfo de Sarkozy en la elección presidencial del próximo año.
Un artículo de la New York Revies of Books asegura que según Strauss-Kahn, su celular desapareció antes de su arresto y que antes había sido hackeado. También describe imágenes de los empleados del hotel que celebran cuando la camarera reporta el supuesto ataque.
Un amiga de Strauss-Kahn supuestamente le advirtió que un correo electrónico que había enviado había sido leído en las oficinas del UMP, en París. Si fuera cierto, significaría de acuerdo con la New York Review of Books, “que tiene derecho para sospechar que podría está bajo vigilancia en Nueva York. Había sido advertido por un amigo en el cuerpo diplomático que podría haber un esfuerzo para involucrarlo en un escándalo. La advertencia de que su BlackBerry podría haber sido hackeada era la más alarmante”.
El autor de la historia de la New York Review of Book, Edward Epstein, dijo a la agencia France Presse: “No diría que fue una conspiración política, pero sí que había gente que buscaba evidencia de una indiscreción de su parte que pudiera descarrilarlo de la candidatura (presidencial) o del FMI”.
Uno de los abogados de Strauss-Kahn, William Taylor, también dijo a la agencia de noticias que su cliente había sido posiblemente “el objetivo de un esfuerzo deliberado por destruirlo como una fuerza política”. Sin embargo, Taylor quién quería culparlo.
En Francia, el ala política de la derecha describió la historia como fantasía. “Para mí, sí hay hechos, sí hay evidencia clara, por supuesto, no hace falta decir que se tendrán que elaborar conclusiones”, de acuerdo con el UMP.
En una entrevista televisiva tras su regreso a París, Strauss-Kahn confesó “debilidad moral” y una “relación inapropiada” con Diallo , pero negó cualquier agresión violenta. Strauss-Kahn todavía enfrenta una demanda civil de parte de Diallo en Nueva York, pero pidió a un juez rechazarla bajo el argumento de que su trabajo le da inmunidad en casos civiles.
El hotel de Nueva York donde ocurrió el supuesto incidente también calificó la historia como “inexacta y especulativa”. La cadena de hoteles Sofitel publicó un comunicado en el que decía: “El artículo establece que los empleados del hotel Sofitel fueron vistos celebrando en un video de tres minutos. De hecho, el incidente duró solo ocho segundos y ambos empleados categóricamente niegan tener nada qué ver con el señor Strauss-Kahn.
“Los hoteles de lujo Sofitel han cooperado con las autoridades en el caso, como era su obligación cívica y el procedimiento legal. Mientras el juicio civil siga pendiente en Estados Unidos, no será apropiado hacer comentarios sobre el caso”.