Polonia anuncia una amnistía para los inmigrantes ilegales
Miles de inmigrantes ilegales podrán quedarse y trabajar en Polonia dentro de una amnistía anunciada el jueves que subraya la transformación del país excomunista en una potencia económica regional.
Según la amnistía, a partir del 1 de enero los que emigraron por motivos económicos y los que no hayan logrado obtener asilo podrán conseguir una tarjeta de residente por dos años que les permitirá trabajar de forma legal en Polonia.
"Polonia se está convirtiendo en un país más atractivo para los extranjeros porque su creciente posición económica está llevándolo a convertirse en un país de destino, y no un país de transición como ha sido hasta ahora", señaló Rafa Rogala, de la oficina de Migración.
Legalizar a los inmigrantes beneficiará a la economía polaca al convertirlos en contribuyentes, señaló.
La amnistía se aplicará a los inmigrantes indocumentados que llegaron a Polonia antes del 20 de diciembre del 2007 y a los solicitantes de asilo a los que se negó el estatus de refugiado antes del 1 de enero del 2010, siempre que hayan residido en Polonia de forma continuada.
Se espera que el programa tenga más éxito que las amnistías ofrecidas en el 2003 y 2007 porque hay menos restricciones, señaló Rogala.
"La idea es alcanzar el mayor número de extranjeros para regularizar esta situación en la forma más amplia posible", añadió.
La mayoría de los inmigrantes por motivos económicos entraron en Polonia de forma legal pero han superado la validez de sus visados, según las autoridades.
Se cree que más de dos tercios de los inmigrantes ilegales viven en Varsovia y en la región circundante de Masovia. Probablemente unos 7,000 de ellos cumplen los criterios de la amnistía, indicó Jacek Kozlowski, gobernador de Masovia.
Aparte de los ucranianos, bielorrusos y otros ex ciudadanos soviéticos, los miembros de la comunidad polaca de etnia vietnamita serán algunos de los más beneficiados.
Las cifras del eurostat muestran que sólo el 0.1 por ciento de la gente que vive en Polonia nació en el extranjero, la cifra más baja de la Unión Europea.
Eso parece estar a punto de cambiar gracias a una economía boyante y una escasez de mano de obra agravada por la emigración de muchos trabajadores polacos a la Europa Occidental desde que Polonia es miembro de la Unión Europea (2004).
Mientras gran parte de la UE reduce su velocidad debido a la crisis de la zona euro, se espera que la economía polaca crezca un 4 por ciento este año. Fue el único miembro del grupo de los 27 en evitar la recesión durante la crisis financiera del 2008-2009.