Un estadounidense es sentenciado a muerte en Irán por presunto espionaje
El estadounidense Amir Mirzaei Hekmati, que fue llevado a juicio en Irán por presunto espionaje, fue condenado a muerte casi cinco meses después de su arresto, informó la agencia semi-oficial de noticias iraní Fars este lunes.
Un tribunal condenó a Hekmati de "trabajar para un país enemigo... como integrante de la CIA , y también por sus esfuerzos para acusar a Irán de estar involucrado en el terrorismo", según Fars.
Antes de la sentencia, su familia y Estados Unidos negaron las acusaciones en su contra.
"Estamos profundamente preocupados de que Amir no tenga un juicio justo", dijo la familia en un comunicado la semana pasada. "Nos hemos esforzado para proporcionar a Amir un abogado en Irán. Hemos tratado en vano de contratar a por lo menos 10 diferentes abogados en Teherán”.
La familia dijo que su hijo fue representado por un abogado que nombró el gobierno. “Bajo cualquier estándar, esto no es aceptable en un proceso de ley", dijeron, según el comunicado. "No vamos a dejar de esperar y orar por la justicia, por un diálogo pacífico con Irán, y por el regreso seguro a casa de Amir".
Hekmati, un exmarine de Estados Unidos, fue detenido en agosto mientras visitaba a su abuela y otros parientes, realtó su familia en Michigan el mes pasado.
Los Hekmati señalaron que su hijo sirvió a los marines desde 2001 hasta el 2005. Más tarde, comenzó su propia empresa lingüística y brindó sus servicios a los militares y a negocios civiles.
Sus contratos militares incluyeron capacitación en competencia cultural. Trabajó con las tropas en las bases militares para promover la comprensión y la comunicación positiva, con personas de otras culturas, agregaron.
Fars informó que Hekmati dijo que trabajó para el ejército de Estados Unidos durante cuatro años y más tarde para la CIA, donde fue enviado a Afganistán y tuvo acceso a documentos secretos.
Se suponía que Hekmati daría información a los iraníes en dos partes; la primera de forma gratuita, y si les gustaba iba a pedir 500,000 dólares para la segunda parte, según Fars.
Hekmati dijo que iba a obtener un recibo del Ministerio de Inteligencia por el dinero, reportó Fars. El juez especuló sobre si el recibo sería utilizado más tarde como evidencia que vincularía a Irán con actividades terroristas, dijo la agencia de noticias.
Si Irán le hubiera pagado, Hekmati le dijo al juez que se hubiera quedado con el dinero y hubiera vivido en Irán, según Fars.
Azadeh Ansari y Shirzad Bozorgmehr contribuyeron con este reporte.